Reina el asombro: Marineros entre los antecesores humanos «primitivos»

21:29 18/02/2010,

Santiago Escuain

18 febrero 2010 — ¿Acaso sería más chocante el titular si dijese: «Aparece un iPod en la Tumba de Tutankamón»? Heather Pringle comenzaba un reportaje en National Geographic News con estas palabras: «No se suponía que fuese a ser así». Se han descubierto en la isla de Creta herramientas de piedra a las que se atribuye una edad de hasta 130.000 años.

La navegación es una característica cultural del hombre. El hallazgo de restos culturales en islas comporta consecuencias de peso contra las especulaciones de la antropología evolutiva. Grabado que representa una nave hawaiana, obra de John Webber, artista a bordo del barco de James Cook, ca. 1781.

Como se cree que Creta ha estado rodeada por las aguas del Mediterráneo durante cinco millones de años, esto significa que antecesores humanos que se creían demasiado primitivos para exhibir una conducta moderna fueron navegantes intencionales. Además, los cientos de herramientas de piedra que se han descubierto en nueve yacimientos sugieren que hubo grupos de ellos que llegaron para establecer poblaciones sostenibles. No llegaron allá por un acaso. Esto implica intención, propósito, «curiosidad y el deseo de explorar». ¿De qué manera afectará esto a las actuales teorías acerca del origen de los humanos?

Se creía que los antiguos humanos de este período no eran capaces de inventar barcos, o siquiera unas simples balsas —siendo que la tecnología se considera como una expresión de conducta moderna. El Homo sapiens con su práctica de conductas modernas, como la ornamentación con joyas y la expresión artística no comenzó a aparecer hasta hace alrededor de cien mil años.

Pero los nuevos descubrimientos indican que estos antecesores humanos eran capaces de una planificación, cooperación y construcción de mucha mayor sofisticación —en este caso, la construcción de barcos— que lo que se sugeriría con sus simples herramientas de piedra.

«Me quedé atónito«, decía [Curtis] Runnels [de la Universidad de Boston]. «La idea de descubrir herramientas de este período tan remoto en Creta era casi tan increíble como encontrar un iPod en la tumba del Faraón Tut».

Según la línea cronológica evolucionista, los navegantes deben haber sido Homo neanderthalensis o incluso Homo erectus. La suposición es que los antecesores humanos llegaron caminando desde África. Ahora esto deja patente que pudieron también haber llegado en barco. Sin duda, este descubrimiento respaldará las polémicas afirmaciones de que el Homo erectus era capaz de construir embarcaciones (véase, por ejemplo, 20/10/2003, en inglés), y que los «Hobbits» llegaron a la isla de Flores por vía marítima.

Los antropólogos que nunca pensaron en buscar indicios en las islas tendrán que comenzar a investigar. «Si humanos antiguos estaban atravesando el Mediterráneo, dice Runnels, entonces podrían desde luego haber atravesado otros obstáculos marítimos, como el Mar Rojo o el Golfo de Adén», escribe Pringle. Y Runnel añade: «Y esto significa que las suposiciones que aceptábamos —que la colonización de Eurasia fue realizada por homíninos primitivos desplazándose por vía terrestre a través del Próximo Oriente en dirección a la India y más allá— tendrán que ser revisadas».

Unas cuantas sorpresas como esta son equivalentes a un conejo en el precámbrico (véase Más sorpresas para Darwin). Si los evolucionistas se niegan a prestar atención al elefante en medio del salón, no es de esperar que se den cuenta de los conejos saltando alrededor de sus pies, y menos de los faraones con iPods.

Una sencilla aplicación del Teorema de Bayes puede valorar el peso de la hipótesis evolutiva a la luz de estos nuevos datos. La hipótesis es que el hombre moderno emergió procedente de antecesores primitivos a lo largo de millones de años. La mayoría de antropólogos evolutivos consideraba que la anterior probabilidad de esta hipótesis era elevada. Los datos nos hablan de herramientas de piedra en una isla, lo que exige unas sofisticadas capacidades de navegación marina. La probabilidad de los datos es 1, por cuanto son materia de observación. La probabilidad de estos datos en base a la hipótesis es sumamente baja. La probabilidad de la hipótesis ha quedado considerablemente reducida. Por tanto, la probabilidad posterior de la hipótesis, dados los datos, que es el producto de la probabilidad de que apareciesen estos datos si se concedía la hipótesis, por la probabilidad de la hipótesis, dividido ello por la probabilidad de los datos, ha quedado considerablemente reducida. La hipótesis darwinista queda rechazada.

Si usamos la misma actualización de las probabilidades, podemos valorar la probabilidad de la hipótesis de la creación. Afirma que el hombre ha sido siempre inteligente y capaz de una conducta deliberada y simbólica. Un accesorio de la hipótesis de la creación es que la tecnología humana sufrió un considerable retraso desde el Diluvio, de modo que hubiera mostrado un avance lento donde se encuentre, al haber tenido que volver a empezar desde cero. Debido a que la probabilidad de los datos concediendo la hipótesis es elevada, aumenta la probabilidad de la hipótesis, dados los datos. La probabilidad posterior de la hipótesis de la creación aumenta así dados los nuevos datos. La hipótesis de la creación queda confirmada.


Lecturas adicionales

Arthur C. Custance:

y también

Frank W. Cousins

EL DARWINISMO ES LA FILOSOFIA ESENCIAL DE LA MASONERIA -2-

EL DARWINISMO ES LA FILOSOFIA ESENCIAL DE LA MASONERIA -2-

Como ya explicamos más detalladamente en la primera parte de este texto, la filosofía masónica se apoya esencialmente en el darwinismo porque, aunque se trate de un bulo, sirve al objeto de sustentar sus principios cimentados en el ateismo, el azar, las guerras y lo espurio. Es decir, le sirve para legitimar la estructura y procedimientos del anticristo (dajjal).

Selami Isildag, decano de la masonería, expresó que como tal aceptaba incondicionalmente el evolucionismo:

“En resumen, quiero hacer mención a algunos principios, pensamientos y prácticas masónicas. Según nuestra institución, la vida surge de una célula única y la aparición del ser humano se debe a una conversión, transformación y evolución de la misma. Se desconoce la naturaleza, razones, propósitos e inicio (de esos procesos). La vida surge, esencialmente, de la energía bio-plasmática y retorna a ella. La única posibilidad de no caer en el dogmatismo es meditar sobre el Glorioso Arquitecto del Universo y adoptarlo como principio majestuoso, como el horizonte permanente del bien y de la belleza, como la cumbre y fase más elevada de la evolución, como el ideal de la humanidad, (que no debe) ser suplantado”1. (Dios está más allá de todo esto).

Los masones denominan específicamente a SATANAS por medio de esas palabras con las que el mencionado conceptualiza al Glorioso Arquitecto del Universo.

Otra fuente nos indica que Erasmus Darwin 2, abuelo de Charles, fue el primero en proponer el evolucionismo “científico” con el objeto de establecer un fundamento para la masonería. Este señor, además de estar vinculado con los masones jacobinos franceses y con las organizaciones Illuminatis, era un antiguo miembro de la logia escocesa Canongate Kilwinning3 Nº 2 y miembro fundador de las comunidades masónicas Lunar (Sociedades Lunar). Todos tenían, como primer objetivo, oponerse a la religión 4.

Ese encadenamiento se bifurca y expande por medio de distintas organizaciones –Movimiento New Ages y otros– que sustentan los mismos pilares de las logias masónicas –universalismo, ocultismo, evolucionismo, etc. –, llegando hasta nuestros días. Podemos leer:

“Ahora bien, el evolucionismo es un concepto religioso pretérito relacionado con la reencarnación. A eso se debe que los New Agers típicos acepten los dogmas del evolucionismo. Este enseña que la selección natural creó todas las formas de vida, desde las más simples a las más complejas (siendo el ser humano el producto final de ese proceso azaroso que tuvo lugar durante miles de millones de años). El reencarnacionismo sostiene que el ser humano atraviesa sucesivas evoluciones a la lo largo de muchísmo tiempo hasta que alcanza la perfección”5.

George H. Steinmetz subraya en su libro “La Masonería: Su Sentido Oculto” que el darwinismo es una suposición engendrada por la masonería:

“…. La antigua doctrina secreta, oculta en las alegorías y los símbolos masónicos, nos habla del evolucionismo de un modo que Darwin nunca lo enseñó. La reencarnación y el…. Karma, propios de ella, son parte de las enseñanzas de la astrología científica”6.

Aunque el darwinismo fue adoptado especialmente por los masones, los miembros más antiguos de sus logias se BURLABAN del mismo en sus discusiones. Pero, de todos modos y en función de sus propósitos, decidieron propagarlo, bajo la apariencia de algo “científico”.

En función de eso, los masones de grado 33 manipulan a los científicos y a los medios de comunicación que pueden (Para más detalles, ver “EL DARWINISMO ES LA FILOSOFIA ESENCIAL DE LA MASONERIA -1-”).

Phillip D. Collins revela ese accionar en su artículo “El Influjo de la Dictadura Científica” y pone de manifiesto el engaño masónico en lo que hace al darwinismo:

“La teoría (darwinista) es una densa amalgama de ‘ismos’, con conceptos, doctrinas filosóficas e ideologías sutilmente velados. Repetimos que las manifestaciones de Tennenbaum respecto a que el darwinismo ‘se basa en proposiciones irracionales absurdas que no provienen de las observaciones científicas, sino que fueron introducidas intencionalmente por razones político-ídeológicas’, se nos presentan concisas y exactas”7.

Por supuesto, la masonería, (por medio de sus artilugios), no tuvo ninguna dificultad en conseguir que estallen hostilidades brutales, que se produzcan asesinatos en masa, que se originen genocidios y que perdure el racismo. Es decir, por medio de sus personeros y con el darwinismo como doctrina, llevó al mundo a un desastre horrible. También usó esa doctrina para hacer lavados de cerebros. Tremenda conspiración provocó más de 350 millones de muertos. Muchos de ellos padecieron dos guerras mundiales sin saber qué era lo que sucedía realmente.

Phillip D. Collins remarca lo antedicho:

“Dice Antony Sutton en «Culto Secreto de la Orden»: ‘Tanto Marx como Hitler tiene sus raíces en Hegel. Entonces llegamos al punto hegeliano donde se cruzan Darwin, Marx y Hitler. Recordemos que el nietzschimo, el darwinismo y el marxismo son mencionados en «Los Protocolos de los Sabios de Sión», algo que no es accidental. El nazismo (como variante del fascismo) brota del nietzschismo. El comunismo surge del marxismo. Ambos se basan en los principios hegelianos y fueron ‘dictaduras científicas’ legitimadas por la ‘ciencia’ de Darwin.

La historia registra el interés de Marx y de Hitler por el evolucionismo darwinista. Carlos Marx concurría en Londres, mientras vivió allí, a las conferencias sobre evolucionismo de T. H. Hukley.

Al reconocer Marx la extraordinaria sincronía entre los conceptos de clase del comunismo y el principio de selección natural de Darwin, envió a éste una copia de ‘Das Kapital’ (‘El Capital’) en 1873. Enamorado del evolucionismo, le pidió permiso para dedicarle el siguiente volumen que redactaría…”8.

Explica el investigador Ian Taylor:

“Como quiera que sea, el fascismo o el marxismo –a la izquierda o a la derecha–…. Encuentran su fundamento en la teoría de la evolución de Darwin”9.

Agrega al respecto Phillip D. Collins:10.

El escritor contemporáneo Werner Maser revela en su análisis de “Mein Kampf” (“Mi Lucha”) que Darwin fue el crisol “de los conceptos de Hitler sobre biología, religión, fuerza y lucha, así como del rechazo de las normas morales”11

La resultante tanto del comunismo como del nazismo fueron enormes baños de sangre, consecuencia natural del pensamiento darwinista –aparentemente erudito– y productos naturales de la “dictadura científica”12

La aplicación en la sociedad de las ideas de Darwin por parte de los comunistas y de los fascistas, produjo millones de asesinados. Unos y otros tienen su origen en una élite (los Illuminatis) que sigue manteniendo los mismos objetivos de siempre. Según el mantra darwinista que reza “supervivencia del más apto”, la victoria demandará mucha sangre derramada13.

La actual estructura del anticristo, la masonería, se infiltró por todos lados bajo un ropaje “darwinista” y condujo a la fosa a millones de personas. Esa estructura destruyó y destruye naciones y fue y es la primera perpetradora de masacres de creyentes en función de una supuesta doctrina científica: el evolucionismo. Sin embargo, además de no contar con una sola prueba científica, cada hecho en este campo demuele una y otra vez la teoría de la evolución. Que Darwin fue un gran timador es algo probado, un hecho certificado.

Resulta increíble que la gente adhiera ciegamente a una mentira tan obvia y que semejante engaño haya influido tanto en todo el mundo. Sin embargo, al ver que esa impostura es manejada de manera prácticamente en exclusiva por la masonería, podemos entender porqué sucede eso.

El complot urdido en las logias masónicas ha llegado a todos los puntos del planeta. Cada vez que quieren pasar gato por liebre proceden del mismo modo que lo hicieron con la teoría de la evolución, es decir, recurriendo a todo tipo de medios, incluido el de la fuerza despótica. Y siempre lo hacen para someter a su imperio las instituciones gubernamentales, los pueblos, los medios de difusión, los países.

Dios mediante, estamos muy cerca de la época en que reaparecerá Hazrat Mahdi (P) y retornará Jesús (P), para poner fin al sistema de la incredulidad.  Entonces las personas volverán a arraigarse en la fe, obtendrán la paz y el bienestar y seguirán el sendero que sus conciencian les dicten. Finalizará para siempre la conspiración del anticristo y, Dios mediante, los seres humanos nos veremos salvos de las calamidades causadas por el mismo.

NOTAS

1- Dr. Selami Isindag, Pantheism-the Philosophy of Pantheism, Inspirations from Freemasonry, Istanbul 1977, p. 190
2- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 6
3- John Daniel, Two Faces of Freemasonry, Day Publishing, 2007, p. 120
4- Henry Morris, The Long War Against God, p. 198
5- The Jesuit Pierre-Teilhard-De-Chardin, p. 2 – http://www.scribd.com/doc/14090263/Pierre-Teilhard-De-Chardin
6- George H. STEINMETZ, Freemasonry: Its Hidden Meaning, p. 37
7- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 4
8- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 7
9- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 8
10- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 8
11- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 8
12- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 8
13- Phillip D. Collins, The Ascendancy of the Scientific Dictatorship, 24 February 2005, p. 8

Aug 22, 2009

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EL DARWINISMO ES LA FILOSOFIA ESENCIAL DE LA MASONERIA -1-

EL DARWINISMO ES LA FILOSOFIA ESENCIAL DE LA MASONERIA -1-

El darwinismo constituye el fundamento de la crueldad en el planeta y es el caballito de batalla del anticristo en nuestra época. Pretende, centralmente, separar a las personas de Dios. De ahí que sea la masonería la que más se esfuerza por imponer en la sociedad la teoría de la evolución. La revista Mason Magazine (impresa en Turquía por dicha gente) lo explica así:

“La teoría de la evolución de Darwin demostró que muchos eventos naturales suceden sin la intervención de Dios”1 (Por supuesto, Dios está más allá de semejante cosa).

Los masones se empeñan en hacer creer que la teoría de la evolución es absolutamente científica, con el objeto de sustentar y propagar sus inmensas mentiras. De todas maneras, las especulaciones evolucionistas no cuentan con ninguna evidencia científica que le den respaldo y hoy día se han desintegrado completamente debido a los 250 millones de fósiles que las refutan y debido a otras cuestiones que hacen incuestionable la Creación. LA TEORIA DE LA EVOLUCION ES EL MAYOR FRAUDE Y ENGAÑO JAMAS PRESENTADO EN EL NOMBRE DE LA CIENCIA.

Otra publicación masónica, Mimar Sinan, hace la siguiente consideración sobre el darwinismo:

“Hoy día, en todos los países del mundo, la única teoría valida es la de Darwin y las que devienen de ella”2.

La masonería intenta imponer el darwinismo como una teoría científica, pues le sirve de herramienta para sus fines siniestros. Por ende, una de sus obligaciones principales es propagarlo. La revista Mason Magazine se refiere a este “deber masónico”:

“El mayor deber masónico y humano es respaldar la ciencia positiva, difundirla y educar en la misma (es decir, en el darwinismo), teniendo en cuenta que es la única manera de (expandir) el evolucionismo”3.

Un importante referente de la masonería, Selami Isindag, describe en su libro Masonluktan Esinlenmeler (“Estímulos de la Masonería”) cómo consideran a los humanos a la luz del evolucionismo:

“Desde el punto de vista del evolucionismo, los seres humanos no se diferencian de los animales. La única fuerza que opera en el desarrollo y evolución de los primeros, es la misma a la que están sometidos los segundos”4.

La masonería, como estructura del anticristo y para lograr sus objetivos espurios, se vale del darwinismo, debido a que éste sostiene que los humanos son animales que pasaron a existir por casualidad. Por eso lo respaldan, lo aceptan como científico y lo defienden. Y para difundirlo se valen de la opresión, la imposición, la crueldad y la mentira.

Para comprender mejor esto, examinaremos de qué manera la masonería apoyó y presentó la ideología del anticristo en la época de Darwin.

Darwin Recibió el Apoyo de la Masonería

Algo importante que prueba que el darwinismo es uno de los timos más grandes usado por la masonería, es la resolución adoptada por ésta en una de sus reuniones. A pesar de que los masones se burlaban de las suposiciones de Darwin, El Consejo Supremo de Mizraim Grado 33 de la Masonería de París las promueve como ciencia. Dice el acta:

“Es con este objetivo en vista (es decir, que el evolucionismo es una teoría científica) que promovemos a través de nuestra prensa una confianza ciega en él. Los intelectuales, engreídos por sus conocimientos carentes de toda verificación lógica, difundirán toda la información que nuestros especialistas les harán llegar, luego de arreglarla convenientemente, con el propósito de educar sus mentes en la dirección que queremos. No supongan en ningún momento que lo que decimos son palabras huecas: esmérense para percibir que, gracias a nuestros arreglos, impulsarán el éxito del darwinismo…”5.

La masonería de los EE. UU. adoptó la resolución de Mizraim casi de inmediato. Por su parte, la revista New Age, en su edición de Marzo de 1922, dijo que el reinado de la masonería se establecerá por medio del evolucionismo aplicado al ser humano en particular y a todo en general.

Como podemos ver, la falsa imagen de científica de la teoría de la evolución es algo urdido por las logias masónicas de grado 33. Esta gente admite abiertamente que usarán a los estudiosos y a los medios de información bajo su control para presentar su superchería como algo científico, aunque la encuentran risible. Y cuando dicen que gracias a sus manipulaciones el darwinismo alcanzará un éxito considerable, se refieren al buen resultado alcanzado en su infiltración en las universidades, en las escuelas, en los libros de texto y en la mayoría de los medios de comunicación, así como en silenciar y obstruir los criterios y actividades antidarwinistas, recurriendo incluso al “apriete”. Además, sus patrañas alcanzan un “éxito” mayor al forzar a la Iglesia Anglicana a pedir disculpas por sus críticas a Darwin y al apremiar al Papa para que realice conferencias prodarwinistas en el mismo Vaticano. Queda en claro que la estructura del anticristo, para imponer sus criterios perversos, opera de manera efectiva a través de las logias masónicas.

Otra evidencia importante de la relación entre la masonería y el darwinismo se encuentra en las actividades que desarrolló Thomas Huxley, el más entusiasta sostenedor de Darwin en vida de éste y a quien se lo denominó el “bulldog de Darwin”. Fue miembro de la Sociedad Real Para el Avance de la Ciencia Natural, fundada en 1660, una de las instituciones científicas más importantes de Inglaterra. Todos sus miembros, sin excepción, eran masones67.

Aunque no ameritaba nada en particular, fue aceptado oficialmente en esa institución siendo muy joven debido a que lo consideraban un importante y ferviente defensor de Darwin.

El y otros miembros de la Sociedad Real apoyaron al autor de “El Origen de las Especies” antes y después de su publicación. Y el respaldo era tal, que la institución empezó a otorgar la “Medalla de Darwin” –como si fuese un Premio Nobel– a los científicos que consideraban digno de ello.

En resumen, Darwin, quien también era masón, no estaba solo, sino que tenía el respaldo organizado en lo que se refiere a la presentación y divulgación de sus elucubraciones. Ese respaldo provenía de una clase social y de los grupos constituyentes de la masonería. El teórico marxista Antón Pannekoek se refiere en su libro “Marxismo y Darwinismo” a ese hecho significativo y explica cómo recibió el respaldo de la burguesía, es decir, de la clase capitalista rica de Europa:

“Todos saben que el marxismo debe su importancia y posición al papel que cumplió en la lucha de clase del proletariado… no es difícil constatar que por la misma experiencia pasó el darwinismo. Este no es sólo una teoría abstracta adoptada por el mundo científico después de discutírsela de modo rutinario. No. Apenas presentado, contó con defensores y oponentes apasionados… El darwinismo también jugó un papel en la lucha de clases, motivo por el cual se expandió tan rápidamente, sin faltarle sus grandes detractores y sus grandes vindicadores…”8.

Lo expresado exhibe porqué la masonería da tanta importancia a la teoría de la evolución: su objetivo es imponer que los seres humanos y todo lo existente se corporizó por casualidad. Por supuesto, se trata de algo erróneo presentado como cierto y basado en la filosofía materialista, filosofía que es esencialmente falsa. Según la masonería, la teoría de la evolución es el único método o camino para negar la existencia del Creador (Sin duda, Dios está más allá de esa patraña) y aceptar a lo que llaman “casualidades”, como “deidades”. A eso se debe que respalde, defienda, difunda y proteja los supuestos evolucionistas en toda circunstancia, aunque para ello deba recurrir a las falacias y a acciones inhumanas. Ese es el motivo por el que tal mentira es protegida con gran ahínco. Esa es la razón por la que el mundo está dominado por la dictadura darwinista.

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NOTAS

1 Mason Magazine, Issue: 25-26, p.14
2 Mimar Sinan Magazine, Issue 38, 1980, p. 18
3 Türk Mason Magazine, Issue: 25-26, March 1977, p. 59
4 Dr. Selami Isindag, Sezerman Kardes VI, Masonluktan Esinlenmeler [Inspirations from Freemasonry], İstanbul 1977, pp. 78, 110.
5 John Daniel, Two Faces of Freemasonry, Day Publishing, 2007, p. 121
6 Albert G. Mackey. «Charles Darwin and Freemasonry». An Encyclopedia of Freemasonry New York: The Masonic History Company, 1921, Vol. III
7 John J. Robinson, Born in Blood, p. 285
8 Anton Pannekoek, Marxism and Darwinism, Translated by Nathan Weiser, Chicago, Caharles H. Kerr & Company Cooperative

Aug 22, 2009

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LOS USOS DEL DARWINISMO

LOS USOS DEL DARWINISMO

Esta conferencia considera el modo en que un tópico en la historia de la ciencia puede usarse para ilustrar diversas dimensiones del estudio de la ciencia. El Darwinismo nos suministra un caso de estudio particularmente interesante porque la vida y la época de Darwin y su círculo están muy bien documentados con abundantes fuentes primarias y secundarias. Por otra parte, la teoría darwiniana es una de las más profundas en el amplio campo de la ciencia, capaz de proporcionar una respuesta convincente a la pregunta ¿qué es la vida?

  1. Tabla 1 Fechas y sucesos significativos en la vida de Darwin
1809 Nace en Shrewsbury. Nace el mismo año de la publicación de la Philosophie Zoologique de Lamarck. Su padre, Robert Darwin es un médico acomodado. Su madre, un miembro de la familia Wedgwood. Su abuelo Erasmus Darwin es físico y científico.Su familia pertenecía a los Whigs (de mentalidad liberal) y a los Unitarians (críticos con la Iglesia oficial de Inglaterra). Ambiente de librepensamiento. Los Darwin y los Wedgwood rechazaban la esclavitud.
1818 Acude al internado de Shrewsbury Curriculum dominado por los clásicos. Darwin no consigue sobresalir pero muestra un interés extracurricular en química y tiro. Su padre lo desaprueba y escribe que «Si sólo tienes interés en disparar a perros y cazar ratas, serás una desgracia para ti mismo y para tu familia» (Desmond y Moore, 1991, p. 20)
1825 Deja la escuela (dos años antes) y acude a Edimburgo a estudiar medicina. Edimburgo era entonces la Atenas del norte, una ciudad cosmopolita en el centro de la ilustración escocesa. Durante el verano de 1825 lee la Historia natural de Selbourne de Gilbert White y la Zoonomía de su abuelo.
1826 Desilusionado con los estudios de medicina se une a la Plinian Society Esta era un grupo radical que criticaba la religión establecida. Trabó conocimiento con Robert Grant –francófilo, radical, experto en vida marina y esponjas y seguidor de Lamarck-. Tales ideas eran peligrosas en la Inglaterra postnapoleónica donde la reacción contra la Revolución Francesa desembocó en un largo periodo de predominio conservador en política. Aún así, Darwin se mueve en esos círculos en los que se habla mucho de radicalismo, materialismo y transformismo.
1827 Darwin abandona su carrera de medicina y se matricula para cursar una licenciatura en Letras en Cambridge, seguida por las Ordenes Sagradas. Darwin destinado para la Iglesia. Durante este periodo Darwin es un ferviente seguidor del cristianismo. Cambridge era entonces muy diferente de Edimburgo. Constituía el centro del Anglicanismo.
1828 Darwin conoce al Reverendo John Henslow (Profesor de Botánica). Darwin adquiere valiosas destrezas de Henslow. Al tiempo que desarrolla una manía coleccionista por los escarabajos, llegando a poseer una de las mejores colecciones de Inglaterra.
1828-31 Darwin estudia las Evidencias de Cristiandad de Paley. En 1831 obtiene su graduación en Letras. Impresionado por la analogía del relojero. Un reloj necesita de un relojero por lo tanto el mundo natural, con sus múltiples evidencias de propósito y diseño, implica un Creador. Dios existe.
1831 Planifica un viaje a Tenerife Darwin había leído las narraciones de los viajes de Humboldt y concibió el proyecto de viajar a Tenerife. Henslow le puso en contacto con el Reverendo Adam Sedwick para que adquiriera algunos conocimientos geológicos de cara a su viaje a Tenerife.
1831 Darwin y Sedwick viajan al Norte de Gales Darwin aprende geología
1831-1836 Viaje del Beagle. Darwin como compañero de FitzRoy. Darwin mismo reflejó que «El viaje del Beagle ha sido el suceso más importante de mi vida». Se llevó con él el primer volumen de Los principios de Geología y se convirtió al Uniformitarismo.
6 de enero de 1832. El Beagle entra al puerto de Santa Cruz Noticias de que el barco iba a ser puesto en cuarentena durante 12 días a causa de un brote de cólera en Inglaterra. FitzRoy decide no esperar y el barco se hace a la mar. Darwin queda profundamente desilusionado.
1836 Retorno a Inglaterra Por este tiempo Darwin es ya bien conocido en los círculos científicos debido a sus colecciones enviadas desde Sudamérica. En julio de 1837 abre el primero de sus muchos cuadernos de notas sobre transformismo.
Octubre de 1838. Lectura de Malthus Un momento decisivo en la formación de las ideas de Darwin . Comprende que la excesiva fecundidad de la naturaleza conduce a la lucha y la competencia por los recursos escasos y que las variaciones que ayudan en esa lucha tienden a ser preservadas.
1842 Se traslada a Down House en Kent Bosqueja 35 páginas de su teoría.
1844 Bosqueja 200 páginas dejándolas al cuidado de su mujer. También comienza la demora de Darwin. Probablemente deseaba acumular más hechos pues también comprendía que la teoría levantaría controversia y ofendería a muchos, incluida su mujer. Sus dudas interiores y ansiedades fueron probablemente las causantes de su continua mala salud.
Junio de 1858 Una carta de Wallace llega a la casa de Darwin Darwin saca rápidamente el Origen de las Especies en 1859
1871 The Descent of Man and Selection in Relation to Sex Aquí Darwin esboza su otra gran contribución a la comprensión de los mecanismos de selección: la selección sexual. La teoría de la selección femenina fue negligentemente olvida durante cerca de 100 años pero emergió triunfante desde 1970.
1872 Expression of the Emotions in Men and Animals Aquí Darwin amplía su convicción en la continuidad entre la mente animal y la humana.
1881 The Formation of Vegetable Mould through the action of Worms Este es el último trabajo de Darwin y en lugar de pontificar sobre los grandes temas, regresa a una cuestión humilde. Siempre estuvo fascinado por la acción de los gusanos cuyas minúsculas acciones durante largos periodos de tiempo ocasionan, al final, grandes cambios.
19 de Abril de 1882. Darwin muere. Enterrado en la Abadía de Westminster Sus ideas son ahora aceptadas por el establishment A ello contribuyó también el poder de una élite científica emergente: Huxley y Hooker

Sumario

Un estudio de la vida de Darwin indica el proceso de creatividad científica y algunas circunstancias personales típicas intrínsecas al hacer de un científico del siglo XIX.

  1. Estaba bien situado económicamente pues formaba parte de una familia rica con importantes relaciones. Más tarde adquirió una pequeña fortuna a través de la herencia e inversiones sólidas en tierras y ferrocarriles.
  2. Entorno intelectual estimulante. Su familia fue liberal y librepensadora.
  3. Serendipia: Darwin conoció a la gente adecuada en el momento adecuado. (Grant, Hensow, Sedgwick y Lyell)
  4. Coraje y perseverancia. Se necesitaba un gran coraje para circunnavegar el globo en 1830. Darwin supo también proseguir con sus ideas evolucionistas a pesar de sus implicaciones heréticas. Luchó también contra la enfermedad física, provocada probablemente por la ansiedad.
  5. Tenacidad en acumular hechos. Darwin fue obstinado en su colección de un abrumador cuerpo de evidencia.

Valor Educativo

Los estudiantes que encuentran la ciencia remota, abstracta y carente de interés humano pueden ser atraídos al estudio de la historia de la ciencia a través del drama de las vidas de los científicos.

2.El darwinismo suministra una ilustración significativa de como el conocimiento y descubrimiento científico es influido por un contexto social más amplio. El diagrama siguiente es una ilustración de los principales puntos:

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Problema de la pobreza urbana

Darwin vivió inmerso en la revolución industrial. Observó como las masas de población británicas emigraron desde la campiña a las ciudades. El censo de 1831 mostraba que la población británica era de 24 millones –ésta se doblaría en treinta años. En los duros inviernos sólo uno de cada diez sobrevivían con las limosnas estatales. La sobrepoblación urbana y la pobreza acarreaban miseria a gran escala y creció en la mente de la gente el problema de qué hacer con el creciente número de pobres y desposeídos. Una solución, propuesta por los intelectuales Whig y malthusianos como Harriet Martineu era incrementar la competitividad para eliminar a los débiles e irresponsables. El estado no intervendría sino para permitir que la competitividad siguiera su propio curso. Así, en 1831 la ley que permitía ayudar a los pobres fue derogada. Los Whigs argumentaron que ello rebajaría los costes laborales.

Malthus y la Revolución Francesa

La Revolución Francesa llenó de miedo a las clases terratenientes británicas. ¿Qué sucedería si se extendiera a Gran Bretaña? En parte como respuesta, Malthus publicó su Essay the Principle of Population en 1798, mostrando que el progreso social era imposible más allá de un cierto punto y que los ideales igualitarios de los franceses eran imposibles desde que la población humana creciera más allá de los recursos, pues desembocarían en pobreza y lucha.

La lectura de Malthus fue decisiva. Ésta le proporcionó a Darwin el concepto crucial de sobreproducción, lucha, competencia y supervivencia de unos pocos. Las ideas malthusianas eran debatidas abiertamente en el círculo de Darwin en 1831. Una de las coincidencias más extraordinarias en historia de la ciencia es el simultáneo descubrimiento de la selección natural por Wallace y Darwin. El mismo Wallace anotó:

La coincidencia más interesante del asunto, pienso, es, que tanto Darwin como yo llegamos a la misma teoría a través de Malthus…» (anotado en Hubbard, 1979)

Cría comercial

Gran Bretaña atravesó, no sólo una revolución industrial, sino también una revolución agraria. Granjeros y criadores comerciales fueron experimentando con nuevos tipos y variedades de plantas y animales. Darwin mismo adquirió una paloma de cría y se unió a las sociedades locales. Fue de la cría de animales de donde tomó su metáfora crucial de selección. Así como un criador selecciona, así también lo hace la naturaleza. Nota que el mismo Darwin publicó sobre el tema en Variation of Animals and Plants under Domestication, 1868.

Adam Smith y el laissez-faire individualista

En The Wealth of Nations (1776) Smith mostraba como el efecto de las acciones de numerosas individualidades, cada una persiguiendo su propio interés, podría dar lugar a una imagen de armonía y estabilidad general. Este laissez-faire probablemente influyó en la mentalidad de Darwin. Darwin era un Whig y sus lealtades políticas estaban del lado de la clase media emergente: los empresarios y las clases de dirigentes y profesionales. El Darwinismo ofrece un análisis similar del mundo natural: lo macroscópico es entendido examinando las acciones de las individualidades atomizadas. Lo que puede aparecer como un cuadro de armonía y cooperación es en realidad el efecto combinado de intenciones egoístas. Marx y Engels fueron conscientes de esta congruencia con las ideas de la época. En 1862 Marx escribe a Engels:

Es significativo como Darwin reconoce entre las bestias y las plantas su sociedad inglesa con su división del trabajo, competencia, apertura de nuevos mercados, «invenciones» y la malthusiana «lucha por la existencia». Es el «bellum omnium contra omnes»… (anotado en Hubbard, 1979)

A nivel más general haríamos notar que la evolución estaba en el aire. Numerosos pensadores estaban especulando en los años cuarenta y cincuenta del siglo XIX acerca de la evolución orgánica y social. Es notable que la frase «supervivencia del más fuerte» asociada tan a menudo a Darwin provenía de hecho de Herbert Spencer quien la usó en su ensayo publicado en 1851 referido al crecimiento de la población humana. Así como Darwin tomó ideas de la cultura en sentido amplio, las moldeó y usó para un buen fin científico, así también sus ideas fueron aplicadas rápidamente en forma de Darwinismo Social.

La Royal Navy y los viajes de exploración.

Gran Bretaña en 1830 era una nación marítima poderosa. Su riqueza dependía del comercio y la exploración. Tal era lo que se pretendía de la misión del Beagle: inspeccionar las costas de Sudamérica. El barco estaba preparado para llevar también a bordo a un naturalista y algún equipamiento científico. La expansión imperial y la catalogación de la naturaleza formaban parte de una mentalidad colonial similar.

Papel victoriano de los sexos

Es fácil ver, especialmente en The Descent of man and Selection in Relation to Sex (1871), que Darwin suscribió el punto de vista según el cual la división sexual del trabajo y las habilidades del hombre y mujer victorianos eran algo natural:

«La diferencia principal en la capacidad intelectual de los dos sexos queda demostrada en los logros que los hombres alcanzan en cualquier cosa que realicen, de mayor nivel de lo que puedan hacerlo las mujeres- da igual que se necesite un pensamiento profundo, la razón, o la imaginación, o simplemente el uso de los sentidos y las manos… el promedio de inteligencia en el hombre debe estar por encima del de la mujer…»

Valor Educativo

A través de este análisis los estudiantes pueden ver que la ciencia no tiene lugar en un espacio cultural vacío. La ciencia es alimentada por una cultura más amplia: los científicos usan recursos (intelectuales y materiales) provenientes de esa cultura y contribuyen, a su vez, a ella.

Interrogante para la discusión: ¿Es el valor verdad de una teoría cuestionada, de alguna manera, por una demostración de las influencias sociales?

3. 

3.1.

Los religiosos fundamentalistas en USA han adoptado al menos tres tácticas:

  1. La prohibición de la enseñanza de la evolución, ej. Tennessee (1925) –de ahí el juicio de Dayton-, Mississipi (1926), Arkansas (1928) y Texas (1929)
  2. Renombrar el creacionismo como ciencia creacionista y exigir que puesto que es una ciencia debe ser enseñada en paralelo al darwinismo.
  3. 3. Declarar que la evolución es sólo una «teoría controvertida» (Alabama 1995 aprobó una ley insistiendo en que los libros de biología deberían llevar una etiqueta describiendo la evolución como una teoría controvertida).
  4. Quitar la evolución de los exámenes estatales. (Kansas, 1999)

Respuesta

  1. En 1968 la Corte Suprema de USA invalidó el estatuto de Arkansas sobre las bases de la primera enmienda –era inconstitucional porque la educación no puede ser diseñada en función de las necesidades de un grupo religioso específico.
  2. En 1987 la Corte Suprema de USA halló inconstitucional el Acta sobre el Creacionismo de Lousiana porque la ciencia de la creación refrenda la religión.

Punto de discusión

¿Es la evolución una mala ciencia porque en realidad nadie observó los hechos? ¿Es la evolución una teoría o un hecho?

3.2. Considerar de nuevo el mínimo de cuatro condiciones para que la selección natural tenga lugar:

  1. Existen en el mundo entidades capaces de autoreplicarse.
  2. El proceso de replicación no es perfecto, se cometen errores y la siguiente copia puede no parecerse perfectamente a su original.
  3. El número de copias de seres que pueden ser hechas depende de la estructura de los seres en su interacción con el mundo de fuera tal como la habilidad para hacerse con los recursos.
  4. Como un resultado de la naturaleza finita de los recursos, de los espacios en los que operan, etc. esos seres experimentan un éxito diferencial en la reproducción, así algunas tienen unas estructuras más favorables que otras para el proceso de autoreplicación.

Es fácil apreciar que las entidades anteriores pueden no formar parte del ADN. Es aún más impresionante darse cuenta que las entidades pueden no necesitar ser, en absoluto, físicas; pueden ser, en resumen, ideas que existen en los cerebros y se mueven entre éstos.

La difusión de Memes

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Punto de discusión

¿Es este nuevo tema de la mímesis una analogía entretenida o tiene un poder real para explicar la transmisión de la cultura?

LA PROFUNDIDAD DEL DARWINISMO

¿QUIENES SOMOS?

Un primate. Homo sapiens

Un mono desnudo, colocado aquí sin explicación, mirando fijamente a las estrellas, pidiendo a gritos un destino.

¿DE DONDE VENIMOS?

De nuestros padres.

De nuestros antepasados.

Del Homo habilis.

Del Homo erectus.

Del Australopitecus.

De mamíferos semejantes a simios que vagaban por las planicies africanas hace aproximadamente 7 millones de años.

De pequeños roedores que sobrevivieron a la extinción de los dinosaurios hace 65 millones de años.

¿POR QUÉ ESTAMOS AQUÍ?

Nuestros antepasados dejaron copias de sus genes; nadie desciende de un antepasado estéril. Los genes que llevaban nuestros antepasados y que nosotros hemos heredado les permitió sobrevivir y dejar copias de sí mismos.

Punto de discusión

¿Son estas respuestas adecuadas, satisfactorias, convincentes?

4. «Aquellos que olvidan la historia están condenados a repetirla» (Santayana)

4.1 

  1. La evolución, si se deja sin comprobar, es progresiva y nos llevará a una mejora gradual en la condición humana.
  2. La evolución aporta resultados deseables cuando queda al descubierto. Así pues el papel adecuado del estado sea el laissez faire. Spencer, por ejemplo, llevó este pensamiento hasta tal extremo que concluyó que el estado no debería crear escuelas ni incluso faros.

4.2  floreció en Gran Bretaña entre 1880-1930, en Alemania entre 1930-1945 y en Estados Unidos entre 1910-1950. La Eugenesia tiene dos polos:

  1. La Eugenesia positiva: el realce de la reserva genética o de la estirpe nacional fomentando lo adecuado y saludable para la cría.
  2. La Eugenesia negativa: la eliminación de lo inadecuado genéticamente por medio de la extirpación o la muerte.

Punto de discusión

1.¿Es el darvinismo social una filosofía política sólida? Si no ¿Cuál es el problema?

2.¿Qué hay de malo con la eugenesia como una política en términos de

a) moralidad

b) practicabilidad

3.¿Se está introduciendo la eugenesia sigilosamente a través de las revisiones médicas prenatales para detectar anomalías genéticas?

Bowler, P. (1982) Evolution : The History of anIidea, Berkeley, Los Angeles and London, University California Press.

Cartwright, J. (2000) Evolution and Human behaviour, Darwinian perspectives on human nature. London Macmillan

Darwin, C. (1859) On the Origin of Species by Natural Selection. London, John Murray.

Dawkins, R. (1976) The Selfish Gene, Oxford University Press

Dawkins, R.(1986) The Blind Watchmaker. London, Longman.

Desmond, A, and J. Moore (1991). Darwin. London, Michael Joseph.

Une biographie vivante et extrêmement bien écrite de Darwin. Pas vraiment sur l’Evolution, mais une analyse fouillée du contexte social des idées de Darwin.

MacKenzie, D. (1976). «Eugenics in Britain». Social Studies of Science 6 : 499-532.

Midgely, M. (1978) Beast and Man, the biological roots of human nature, Methuen

Oldroyd, D. R. (1980) Darwinian Impacts : an introduction to the Darwinian revolution. Open University Press.

Richards, J. R. (1987) Darwin and the emergence of evolutionary theories of mind and behaviour, University of Chicago Press, Chicago and London.

Ridley, M. (1996) The origins of Virtue. London, Viking (Penguin Group).

http:/www.lib.cam.ac.uk/Departments/Darwin/calintro.html La correspondance de Darwin

http://www.1.umn.edu/ships/ Beaucoup de références en histoires des sciences (Renvois vers la sociologie, l’histoire et la philosophie de sciences).

www.bshs.org.uk Le site de la British Society for the History of Science. De nombreux liens.

http://depts.washington.edu/hssexec/ Le site de l’American History of Science Society.

http;//www.man.ac.uk/science_Engineering/CHSTM Le centre pour l’histoire des sciences, de la technologie et de la médecine de Manchester.

http;//www.wku.edu/~smithch/index1.htm La page d’Alfred Russell Wallace

http://www.ucmp.berkeley.edu/history/evolution.html Un bon fond pour l’histoire de l’évolution, pensé avec des biographies.

http://157.242.64.83/HBES/websites.htm De nombreux liens ici, une partie du site de la Human Behaviour and Evolution Society.

http://www.world-of-dawkins.com/headlines.htm Le site non officiel de Dawkins, mais bien construit, avec de nombreux liens vers des sites utiles et les développements récents.

http://www.gobiernodecanarias.org/educacion/3/Usrn/penelope/es_confcartwright.htm

Argumentos de la existencia de Dios IV

La creencia universal

Autor: Paulo Arieu

«La creencia universal en la existencia de un Ser Supremo implica que la idea es intuitiva (o sea, conocida por instinto); es innata (o sea, parte de nuestra naturaleza esencial) y racional (comprensible por medio de la razón). Esto revela que el hombre tiene la idea de un Ser infinito y perfecto, y esto hace surgir la pregunta: ¿de dónde sacó el hombre tal idea?

La creencia universal es una verdad básica. Aun las religiones idolátricas mantienen una creencia en alguna clase de dios o dioses. Una respuesta inconsciente traicionó a aquellos que a sí mismos se llaman ateos, al contestar: «Gracias a Dios que soy ateo.» El ateo francés Voltaire oraba durante una tormenta. Ingersoll dijo: «Yo no soy ateo, soy un agnóstico.«»[1]

«Todos los pueblos, desde los más primitivos hasta los más civilizados, han creído, con rarísimas (y prejuzgadas) excepciones, en la existencia de un Ser Supremo, Hacedor del Universo, como única explicación posible a los fenómenos de la metereología, de la fertilidad, etc. Es cierto que, en muchos casos, el politeísmo, el animismo, etc., han obnubilado esta creencia en un único Dios, pero no la han suprimido. Más aún, las investigaciones más imparciales han mostrado, con suficiente evidencia (o, al menos, con la mayor probabilidad), que el monoteísmo es anterior al politeísmo, y que éste ha sobrevivido en los pueblos primitivos al convertir en dioses, genios del bien y del mal, las desconocidas fuerzas de la Naturaleza, mientras las naciones más civilizadas revirtieron desde un politeísmo «más ilustrado», pasando por el «henoteísmo» (o diferentes «dioses» protectores de las naciones respectivas —cf. Josué 24:15-18—), al prístino monoteísmo. Este argumento queda debilitado por la teoría de C. G. Jung sobre los «arquetipos» o símbolos ancestrales del inconsciente colectivo, pues bien pudiera ser que la idea de Dios, común a la humanidad de buena voluntad, fuese un mito heredado de los primeros homínidos, víctimas del pensamiento mágico que en ellos hubo de producir su primera confrontación con las desconocidas fuerzas de la Naturaleza.»[2]

«Este metodo, es llamado por Hebe R.Vidal «EL TRADICIONALISMO». Nació en Francia a principios del siglo pasado y tiene por principales representantes a José de Maistre, De Bonald, Bonetty y sobre todo a Lamennais. Según ellos, la fuente única de la certeza es el consentimiento general, la tradición, puesto que la sola razón individual, dejada a sí misma, está condenada al escepticismo. Lamennais, en su «Ensayo sobre la indferencia», sostiene que la evidencia de que Dios existe nos es impuesta en primer lugar por el consentimiento unánime de los pueblos; la existencia de Dios es una verdad primitiva y fundamental, anterior a toda demostración.

Critica: No podemos negar que el consentimiento unánime de los pueblos —en el caso de que se tenga certeza de él— tiene en sí cierto valor, sobre todo confirmatorio; pero dicho valor depende de que haya razones, argumentos accesibles a todos, que los hayan movido a afirmar unánimemente una determinada proposición, en nuestro caso, la existencia de Dios. En otras palabras: es menester probar que el acuerdo general de los hombres no se ha producido por la mera conjunción de causas accidentales, que pueden haber sido causas de error.

Si todos los hombres, en todos los pueblos, en todos los tiempos, han creído en la existencia de Dios porque tenían pruebas evidentes de tal existencia, entonces el argumento tradicionalista es válido, pero no es anterior a toda demostración, sino que, por el contrario, supone alguna demostración, aunque sólo sea de tipo rudimentario, y se funda, en último término, en el valor intrínseco de la inteligencia humana para conocer con evidencia ciertas verdades. Pero si los hombres de los pasados siglos pudieron probar la existencia de Dios, también la puede probar cualquier hombre de cualquier época; y en tal caso la razón humana es la que, por sí sola, prueba la existencia de Dios.»[3]

«En los tiempos antiguos los sucesos más mundanos estaban conectados con los acontecimientos de mayor trascendencia cósmica. Nuestros antepasados estaban muy ansiosos por comprender el mundo, si bien no habían dado con el método adecuado. El universo primitivo un mundo pequeño, pintoresco y ordenado donde las fuerzas dominantes eran dioses como Anu, Ea y Karona. Los dioses, en las sociedades antiguas, eran necesarios para explicar los cielos, los planetas, los terremotos, las enfermedades, los eclipses, o cualquier otro fenómeno natural. Aunque han venido en muchas y variadas versiones, no parece una exageración decir que, a lo largo de la historia, los dioses han sido una realidad omnipresente.

Los teístas, por supuesto, han explotado este hecho con la mentalidad apologética que les caracteriza. Así, por ejemplo, dice el apologista musulmán Fethullah Gülen:

“desde el mismo inicio de la vida humana, la gran mayoría de la humanidad ha creído en la existencia de Dios. Sólo esto sería suficiente para demostrar Su existencia”

A decir verdad, a mi la lógica de esta argumentación se me escapa por completo. ¿Que tiene que ver la veracidad de una proposición con el número de personas que la crean? No se puede concluir que una proposición P es cierta apelando únicamente al número de personas que la sostienen; sencillamente no se sigue. Es una premisa no demostrada que no encuentra apoyo en la evidencia; aunque muchos todavía no se han enterado.

Por supuesto, Gülen no es el único que pretende que la verdad puede encontrarse en base a un concurso de popularidad. En su libro «las verdades robadas» el sacerdote católico Miguel Ángel Fuentes expone con mayor detalle el razonamiento que denomina «argumento por la creencia universal del género humano»:

El argumento se puede exponer diciendo: todos los pueblos, cultos o bárbaros, en todas las regiones del mundo y en todos los tiempos, han admitido la existencia de un Ser supremo. Ahora bien, como es imposible que todos se hayan equivocado acerca de una verdad tan trascendental y tan contraria a las pasiones, debemos admitir con la humanidad entera que Dios existe.

Primero que nada una observación importante: lejos de una creencia unificada sobre Dios la humanidad ha sostenido cientos de creencias contradictorias que Fuentes engloba de forma simplista en un solo costal: Están los politeístas y animistas que creen en decenas, cientos, o incluso miles de dioses, están los estrictos monoteístas que creen en un único dios; y están los cristianos trinitarios que creen en algo en el medio. Hay panteístas y que creen que el universo mismo es Dios; paganos que creen que ciertos objetos del universo son dioses, y deístas que creen en un Dios trascendente completamente separado del universo.Hay religiones que les conceden a los humanos libre albedrío, y otras que abogan por la predestinación. Unos predican la necesidad de salvación mediante buenas obras y obediencia a la tradición, mientras que otros sostienen que la redención sólo viene a través de un único acto de fe. Hay religiones que creen en la infalibilidad de su libro sagrado y en la necesidad de estudiarlo a fondo y poner en práctica sus enseñanzas, mientras que otras sostienen que el lenguaje humano es sólo un impedimento incapaz de aprehender o transmitir la esencia de la verdad absoluta. Hay religiones que predican el amor, la caridad y la compasión; y aquellas que promueven el odio, la división y el derramamiento de sangre. Hay credos tan lúcidos y racionales que creer en ellos es apenas diferente de no creer en absoluto, y hay cultos cuyas creencias y prácticas son completamente bizarras, con teologías que se asemejan a alucinaciones, sueños, o malas películas de ficción.

De hecho, pocas cosas avalan la naturaleza de la religión de un modo tan obvio como esto: la multiplicidad de creencias religiosas no refleja sino la diversidad y creatividad de la mente humana. Ebonmusings desarrolla este punto en detalle en un juego de trile cósmico.

Más adelante, dice Fuentes:

Según frase de Cicerón, aquello en que conviene la natural persuasión de todos los hombres, necesariamente ha de ser verdadero. Es un axioma del sentido común contra el que en vano protestan los materialistas modernos

Fuentes no nos dice cuales son esas “vanas” protestas o en que se basan, pero al parecer son tan frívolas que no merecen la pena ni considerarlas. Voy a tener que unirme entonces a “esos materialistas modernos” y contradecir a Cicerón: es perfectamente posible que la humanidad entera termine tragándose una falsedad; y para demostrarlo basta con ofrecer (al menos) un contraejemplo.

Adivinación: Sin importar el tiempo y lugar en el que estemos, lo más probable es que nos encontremos con una cultura en la que la creencia en la adivinación está bien generalizada. No se puede negar que los videntes han estado en fragante desacuerdo sobre cual es la mejor forma de hacerlo, al igual que en la religión, pero lo cierto es que se conocen decenas de antiguas estrategias para predecir el futuro basado en factores externos de lo más variados y azarosos: disparar flechas (belomancia), bastones (rabdomancia), huesos o cartas (sortilegios), hojas de té (taseografía), entrañas (aruspicia), cera derretida vertida en agua (ceromancia), manchas y lunares (melomancia), nubes (nefelomancia) y una larga lista de etcéteras. Y eso sin contar practicas como la astrología y la numerología; que siguen siendo muy populares hasta el día de hoy.

¿Cuál sería la explicación de Fuentes para dicha creencia? Si fuéramos a seguir su lógica, estaríamos obligados a concluir que de hecho hay personas que son capaces de predecir el futuro observando las estrellas o vertiendo cera derretida en agua fría. El problema es que la adivinación es una pseudociencia de aquí hasta el polo, y hasta la misma biblia condena explícitamente este comportamiento. ¿Por qué esta creencia generalizada no prueba su verdad? El argumento de fuentes termina casi socavándose a si mismo.

Tierra plana: La humanidad no solo ha vivido en el engaño con respecto a los fenómenos ocultistas, adorando a lo que veía y no al Dios verdadero,  debemos reconocer que «también ha habido creencias erróneas muy extendidas sobre la naturaleza del mundo, especialmente sobre la forma de la tierra. Hasta donde sabemos, todos o la gran mayoría de los pueblos de la antigüedad han descrito la tierra como un disco plano cubierto por un cielo sólido que se junta con la tierra en sus bordes.

Como sostiene Paul Seely:

Los pueblos científicamente ignorantes de todo el mundo concebían la tierra como un solo continente en forma de un disco circular plano. Hay raras excepciones, pero, en pocos casos han pensado a la tierra como un globo planetario.

El link de arriba lleva a un artículo con numerosos ejemplos de antiguas cosmologías tierra-planistas, y se pueden encontrar otros más en este artículo de la wikipedia. Así que el hecho de que todos los pueblos se han adherido a una descripción equivocada del mundo debería estar fuera de discusión razonable. A menos que uno se suicide intelectualmente y termine creyendo que la tierra de verdad es plana, este hecho por si solo es fatal para la tesis de Fuentes. Como hemos visto, tal axioma “del sentido común” se choca de frente con mucho de lo que sabemos sobre ciencia e historia; y por lo tanto podemos añadirlo sin más a la lista de pésimos argumentos para la existencia de Dios.

No obstante, Fuentes señala un punto importante que merece una consideración más a fondo; y es que, independientemente de si Dios existe o no, el carácter universal de la religión es un hecho que debe ser explicado. ¿Por qué la gran mayoría de los pueblo han reconocido alguna clase de divinidad a la que hay que darle culto? ¿Cómo explica un ateo que la humanidad entera se haya equivocado sobre ese aspecto? Podemos extender la pregunta de Fuentes y preguntar: ¿Por qué algunas ideas sobre el mundo llegaron a ser sumamente populares a pesar de su falsedad?

En el caso de la tierra plana la explicación es bastante simple: los antiguos creían que la tierra era plana porque la tierra “parece” plana. Es una creencia razonable hasta que uno se encuentra con datos como los ángulos que producen ciertos objetos con el sol, por lo que es natural que las personas que no tenían acceso a esos datos hubieran llegado a conclusiones equivocadas. Con la adivinación es un poco más difícil, pues no se sigue de ninguna observación natural. Algunos han sugerido que la atracción que siente el ser humano hacia la adivinación está asociada a la ansiedad que siente el ser humano por su futuro y por lo impredecible; otros investigadores, como Julian Jaynes, proponen que el efecto más importante de la adivinación está en que permite desplazar la responsabilidad en la toma de decisiones. De cualquier forma, el punto es que no es necesario que una creencia sea cierta para ganar una aceptación extraordinaria.

De la misma forma, que la humanidad tenga una creencia tan extendida en ídolos y deidades es un hecho que, desde un punto de vista evolutivo, pide a gritos una explicación. ¿Cómo es posible que haya individuos que se muestren dispuestos a sacrificar su tiempo, sus recursos, y hasta sus posibilidades de reproducción en aras de favorecer una idea religiosa? Tras considerar una pila de explicaciones simplistas al fenómeno religioso, Fuentes concluye que la única opción es que “la creencia de todos los pueblos sólo puede tener su origen en Dios mismo, que se ha dado a conocer, desde el principio del mundo”; pero la verdad es que Fuentes no ha tocado ni la superficie en lo que respecta a explicaciones naturalistas de la religión. En el 2007, Daniel Dennett publicó una lúcida presentación de varias de estas explicaciones; y su libro, “Romper el hechizo” es un excelente recurso para enterarse sobre el estado del arte del tema. Estén atentos, porque en un par de semanas estaremos haciendo una reseña del libro.»[4]

Conclución:

Este método de reflexión racional tampoco nos demuestra sine qua non que Dios existe, aunque tampoco su fracaso como método racional implica que Dios no existe, necesariamente, ya que esto implica un absurdo. Solo nos demuestra por un lado la continua imposibilidad de demostrar universalmente la existencia de Dios por medios racionales o filosóficos, por mas buena intención que estos tengan, y segundo, que aun hay mucho que la humanidad debe continuar investigando y que la ciencia irá decifrando acerca de las naciones y sus creencias religiosas.

¿Esta imposibilidad de demostrar racionalmente la existencia de Dios significa que pueden los ateos “probar” realmente que Dios no existe?

Leamos los argumentos que expone Doug Horchak, en este comentario al respecto.¿Cuáles son sus afirmaciones? Examinemos sus razonamientos y conclusiones. Entre los argumentos más comunes de los ateos en contra de Dios están:

Comparar al Dios de Israel con todos los demás dioses de la historia. En la mente de los ateos, todos los dioses tienen el mismo mérito. Según ellos, no hay ninguna diferencia entre Zeus, Tor, Baal, Vulcano, Visnú y el Dios de la Biblia. Afirman que todos los dioses han sido inventados por el hombre para satisfacer sus necesidades sociales y sicológicas.

Desacreditar el concepto de Dios debido a la violencia perpetrada en su nombre. Cuando los ateos analizan la historia, frecuentemente señalan el número de veces que se ha cometido violencia, genocidios, asesinatos, violaciones, muerte y guerras en el nombre de Dios. Ya sea la inquisición, las cruzadas o la depuración étnica en Kosovo y África, estos tipos de violencia son citados comúnmente como prueba de la hipocresía de la religión y el resultado de la creencia en Dios. Los ateos concluyen que es imposible que haya un Dios benévolo y amoroso detrás de todo eso.

• Imputar errores y engaño a las Escrituras. Muchos ateos niegan la existencia del Dios judeocristiano basándose en supuestas discrepancias de la Biblia. Algunos de los ejemplos de discordancia que esgrimen son ciertos temas relacionados con la historia, la ciencia, las enseñanzas de Jesús, la muerte, los asesinatos y las guerras. Según su razonamiento, si la Biblia se contradice a sí misma, es imposible que este libro represente la mente de un Dios omnisapiente.

• Mostrar que el paganismo es parte del cristianismo universal. Aunque el cristianismo tradicional afirma que sus orígenes provienen de los antepasados judíos y de los escritos de la Biblia, tanto Dawkins como Hitchens señalan el hecho de que gran parte de sus doctrinas, ceremonias, imágenes y cultos de adoración se originaron en prácticas paganas que en realidad la Biblia condena. Ellos señalan correctamente que los orígenes de la Navidad y de la Pascua de Resurrección provienen de Babilonia, Egipto y Grecia, no del verdadero Dios creador de la Biblia.

• ¡Concluir que el darwinismo tiene que ser cierto! Los ateos creen que hay una sola explicación en cuanto al origen y desarrollo de la vida: la evolución darviniana. La mayoría de los profesores, maestros y científicos en los campos de la zoología, antropología y biología creen y enseñan esta teoría como un hecho. Los ateos consideran que esta instrucción impartida por los educadores es una prueba aún más fehaciente de que no existe Dios.»[5]

«Otra vez, falta una dimensión que se ha perdido. El hecho es que efectivamente vivimos en un mundo que está confundido prácticamente en todo, incluso en sus conceptos acerca de Dios, la ciencia, la moral, la religión y la Biblia. Mientras mucha gente (como Hitchens y Dawkins) suponen que la historia de la humanidad y la religión representan el mejor enfoque de una visión universal centrada en Dios, ¡la verdad es todo lo contrario! La historia de la humanidad generalmente muestra el rechazo de Dios por parte del hombre. ¡La historia humana no representa lo mejor de Dios, sino lo peor del hombre!»[6]

Por varios miles de  años, desde la caída del hombre en pecado y su gradual alejamiento de Dios, este «ha estado ideando su propia perspectiva de la moral y la vida, lo que incluye varias formas de religión (islamismo, cristianismo, hinduismo, budismo, etc., etc.). Lo que vemos en la práctica, las enseñanzas y la historia de estas religiones casi siempre ha sido concebido y producido enteramente por seres humanos, ¡de ninguna manera por Dios!»[7]

San Pablo dice claramente que nos salvamos solo por la fe, y esto implica conocer a Dios también pro la misma fe.(Gálatas 2,16)

La Biblia de las Américas (© 1997 Lockman)

  • «sin embargo, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino mediante la fe en Cristo Jesús, también nosotros hemos creído en Cristo Jesús, para que seamos justificados por la fe en Cristo, y no por las obras de la ley; puesto que por las obras de la ley nadie será justificado».

La Nueva Biblia de los Hispanos (© 2005 Lockman)

  • «Sin embargo, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la Ley, sino mediante la fe en Cristo Jesús, también nosotros hemos creído en Cristo Jesús, para que seamos justificados por la fe en Cristo, y no por las obras de la Ley. Puesto que por las obras de la Ley nadie será justificado.

Reina Valera (1909)

  • «Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para que fuésemos justificados por la fe de Cristo, y no por las obras de la ley; por cuanto por las obras de la ley nadie sera justificado.

Sagradas Escrituras (1569)

  • sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesús, ella fe de Cristo, y no por las obras de la ley; por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada. Cristo, nosotros también hemos creído en Jesús, el Cristo, para que fuésemos justificados por la fe de Cristo, y no por las obras de la ley; por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada.

BJ

  • «conscientes de que el hombre no se justifica por las obras de la ley sino sólo por la fe en Jesucristo, también nosotros hemos creído en Cristo Jesús a fin de conseguir la justificación por la fe en Cristo, y no por las obras de la ley, pues por las obras de la ley  nadie será justificado. »

notas

[1] A.H.Yetter, Principales doctrinas bíblicas vol. 1 Cursos por correspondencia,p.20, Publicación la Biblia dice, Quito, Ecuador

[2] Francisco La Cueva, Un Dios en Tres personas, p.35,Curso de Formación Teológica evangélica tomo II, Ed. Clie.

[3] Hebe H. R Vidal, Fundamentos de Filosofía,p. 93-94, libreria Huemul, 1970,Bs.As, Argentina
[4] http://www.ateosmexicanos.com/portal/index.php?option=com_content&view=article&id=122:omnipesencia&catid=34:articulos&Itemid=54
[5] Doug Horchak, http://www.lasbuenasnoticias.org/archivos/2009/bn022009/debate.htm
[6] Doug Horchak, http://www.lasbuenasnoticias.org/archivos/2009/bn022009/debate.htm

Hay algo más que darwinismo en la evolución

Hay algo más que darwinismo en la evolución

Enero 29, 2009

El Mundo Digital

¿Por qué algunos de nuestros genes evolucionaron rápido? Está ampliamente extendida la creencia de que la selección natural darwiniana es la responsable, pero una investigación realizada por la Universidad de Uppsala (Suecia) sugiere que un proceso neutral separado (no adaptativo) ha contribuido enormemente a la evolución humana. Sus resultados han sido publicados enPLoS Biology.

Los investigadores identificaron los genes humanos que evolucionan rápido comparando nuestro genoma con el de otros primates. Sin embargo, sorprendentemente, los patrones de evolución molecular en muchos de los genes que hallaron no contenían señales de selección natural. En cambio, sus evidencias sugieren que un proceso independiente llamado conversión génica sesgada (BGC, por las siglas de biased gene conversión) aceleró el ritmo de evolución en ciertos genes. Este proceso aumenta el índice en el que algunas mutaciones se expanden entre una población, al margen de si son beneficiosas o dañinas.”La investigación no sólo mejora la comprensión de la evolución humana, sino que también sugiere que muchas técnicas utilizadas por los biólogos evolucionistas para detectar la selección pueden ser erróneas”, dice Matthew Webster.

Se cree que BGC es más potente en regiones con alta recombinación, y puede hacer que las mutaciones dañinas se expandan entre las poblaciones. Los resultados del estudio van más allá e insinúan que, más que un resultado de la selección darwiniana para nuevas adaptaciones, muchos de los cambios genéticos que se dirigen a los caracteres específicamente humanos pueden ser fruto de la fijación de mutaciones dañinas. Esta hipótesis contrasta con la visión darwinista tradicional de que los caracteres son el resultado de una selección natural en favor de mutaciones adaptativas.

Visto Aqui

Cómo el darwinismo proporciona seguridad en el trabajo

Cómo el darwinismo proporciona seguridad en el trabajo

David Coppedge

Una cosa se puede decir del darwinismo: proporciona oportunidades sin fin para investigar historias que quedan casi fuera de la posibilidad de prueba.

Un ejemplo de ello aparecía en el número de 18 de diciembre [2003] deNature.1 John R. Hutchinson (Royal Veterinary College, Reino Unido), en un artículo de News and Views [Noticias y Opiniones] acerca de la evolución de las aves, examinaba el nuevo ángulo con el que hubiera podido comenzar el vuelo cuando los dinosaurios terópodos extendían sus extremidades anteriores a modo de estabilizadores o alerones mientras iban lanzados a la carrera cuesta arriba (véase nota de 16/01/2003). Antes que el especialista en morfología de los vertebrados Ken Dial, de Montana, formulase esta hipótesis, había dos ideas en competencia acerca del origen del vuelo que constituían una «dicotomía más bien rancia» según Hutchinson: la hipótesis (corredora) del suelo hacia arriba, en el sentido de que los dinosaurios despegaron hacia el aire, y la hipótesis de árbol abajo (arbórea), de que dinosaurios arborícolas saltaron de los árboles (véase nota de 29/01/2003).

Hutchinson no pretende en absoluto que el problema haya quedado resuelto; como mucho, «este trabajo puede iluminar el origen del vuelo en las aves». Pero al proporcionar un posible uso para unos miembros no voladores, que podrían ir mejorando con el tiempo, elimina un punto inverosímil del guión: «Esta es una solución persuasiva para el rompecabezas evolutivo: “¿Para qué sirve media ala?”» Sin embargo, la mayor parte de la transición de dinosaurios a aves sigue siendo difícil, incluyendo la evolución de las plumas (véase notas para 30/10/200321/08/2001) y la necesidad de una evolución simultánea de muchas otras estructuras especializadas como el pulmón de las aves (véase nota para31/10/2003). Pero para Hutchinson, esto no es un fallo de la historia, sino un punto positivo: «Hay muchas cuestiones por explorar todavía, naturalmente, lo que es bueno para muchos investigadores,incluyendo Bundle y Dial, que admiten esto» (énfasis añadido en todas las citas). En otras palabras, esta nueva hipótesis, que el vuelo comenzó a evolucionar cuando se emplearon las extremidades anteriores como alerones (carrera en pendiente asistida por alas, o WAIR por sus siglas en inglés), abre un nuevo mercado laboral. Ahora los investigadores pueden emprender muchos nuevos ensayos experimentales. Hutchinson nos da algunos ejemplos:

 

  • Física: «Los roles relativos de las fuerzas de inercia y aerodinámicaspermanecen desconocidas, así como los parámetros energéticos de la WAIR».
  • Papel de la cola: «Me pregunto hasta qué punto los cambios de función de las extremidades posteriores entre la carrera a nivel y la WAIR, o hasta qué punto el tercer módulo locomotor, la cola,pudiera haber influido en la WAIR».
  • Papel de los pies: «Si la WAIR es tan importante en la historia natural de las aves corredoras (u otras), y si es vital para las aves generar fuerzas de fricción para mejorar la tracción, ¿podrían sus pies especializarse de manera correspondiente?»
  • Uso del WAIR por parte de las aves actuales: «Del mismo modo, no se sabe hasta qué punto está distribuida y es crucial la WAIR para los miles de especies de aves actuales, especialmente aquellas como el tinamou, los kiwis y avestruces, que retienen muchos rasgos avianos ancestrales (por ejemplo, pasar un tiempo relativamente corto en el nido después de salir del huevo, o pasar más tiempo en medios terrestres que arbóreos), aunque Bundle y Dial proporcionan algunastendadoras especulaciones».
  • Forma y Función: «Finalmente, ¿hasta qué punto están vinculados los rasgos anatómicos específicos de las aves a funciones correspondientes a la WAIR?»
  • Investigación interdisciplinaria: «En la lista de deseos para el futuro se incluiría el establecimiento de vínculos seguros entre forma y función para el grupo —Aves o Neornithes— que incluya a todas las aves existentes y a todas las descendientes de su antecesor común más reciente. Si se pudiera lograr todo est, entonces las cuestiones históricas más difíciles de cómo evolucionó la WAIR se volverían solubles, porque se podrían seguir las relaciones entre forma y función a través de los linajes evolutivos». [Pero véase un informe más reciente que plantea graves dudas acerca de las actuales teorías sobre la actual comprensión de la evolución de las aves].

 

Parece, así, que la nueva hipótesis no es precisamente un freno; es una puerta abierta a las oportunidades, una bocanada fresca de aire que saca la historia de la evolución de las aves de la calma chicha en la que estaba sumida:

En ausencia de este conocimiento más extenso, es incierto el grado en que la WAIR fuese esencial para cualquiera de los miembros extintos del linaje de los terópodos, incluyendo las aves más primitivas. Con todo, este trabajo seguirá estimulando la investigación acerca del vuelo y de su evolución. El debate acerca de si el vuelo se originó en criaturas arbóreas o terrestres tiene siglos de antigüedad. La hipótesis de la WAIR ha proporcionado una alternativa biológicamente verosímil a estadicotomía más bien rancia.


1John R. Hutchinson, «Biomechanics: Early birds surmount steep slopes»,Nature 426, 777 – 778 (18 December 2003); doi:10.1038/426777a.

¡Atrapados con las manos en la masa! Este es un importante principio que se debe comprender acerca del darwinismo, y por qué ha alcanzado tanto éxito en el mundo intelectual. Ya no importa si una hipótesis es cierta o no, sino si mantiene a unos perezosos científicos en sus prestigiosas sinecuras como cuentacuentos. La ciencia evolucionista ha quedado liberada de la reproducibilidad, susceptibilidad a la refutación, y capacidad de observación. La palabra clave ahora es verosimilitud, lo que, traducido, significa que la ciencia se ha convertido en ficción. A fin de cuentas, cualquier buena novela o historia corta es verosímil, ¿no? (Y debido a que no existen Leyes de Verosimilitud, al menos será verosímil para alguien, especialmente para el cuentacuentos.)

Para que los darwinistas que estudien la evolución de las aves a partir de los dinosaurios llevasen a cabo realmente su trabajo de manera rigurosa, tendrían que identificar cada mutación benéfica o duplicación génica vincularla con una ventaja funcional real, y seguir su extensión a través de una población. Tendrían que encontrar cada fósil de transición, conocer su edad con exactitud, seguir el desarrollo de todo el hardware orgánico y el software genético relacionados con el vuelo (incluyendo las plumas, las patas especializadas para posarse en ramas, los huesos huecos, los pulmones especiales de las aves, órganos especializados, el cerebro modificado, el tamaño del cuerpo, la tasa metabólica, los músculos y tendones especializados, y los instintos conductuales, como saber cómo emprender el vuelo, aterrizar, usar corrientes térmicas), explicar cómo estos cambios morfológicos proceden desde el embrión hasta el adulto, y muchas cosas más. Evidentemente, todo esto es imposible. Además, tendrían que desvelar, mediante experimentos, nuevas leyes naturales que creen crecientes niveles de complejidad e información en contra de la inexorable presión de la entropía. Incluso si pudiesen realizar estos imposibles experimentos en algún país de Siempre Jamás, nunca sabrían si esto concordaba con la prehistoria sin entrar en una máquina del tiempo y contemplar cómo se desarrollaba toda la historia.

Como esto es demasiado difícil, los evolucionistas han cambiado las reglas. No les gusta hacer ciencia a la manera antigua, a la manera en que la hacíanJouleFaraday Mendel. Es mucho más fácil echarse cómodamente en el sofá y especular. Cuando la Fundación Nacional de las Ciencias comienza a inspeccionar cómo se están gastando los fondos aportados, el darwinista puede enseñar el álbum de fotografías de las últimas vacaciones en las Bahamas (véase nota para el 3 de dic. [2003]), o enseñar un clip de video doméstico de polluelos de perdiz corriendo pendiente arriba en el laboratorio, o exhibir los últimos juegos informáticos (véase nota para el 8 de mayo [2003]); con esto ya parecerá que está bien ocupado. Y es así que Eugenie Scott puede baladronar acerca de toda la literatura científica que respalda el evolucionismo, cómo el darwinista puede hacer que sus estudiantes postgraduados escriban con una jerga especializada paraNature, o Science o National Geographic, acabando con la típica doxología acerca de todas las maravillosas historias a las que abre paso el nuevo giro en el guión.

Llamando al buen criterio frente a las falacias lógicas. Es hora de despertar y examinar el pelaje. Nos han dado gato por liebre. Los llamados biólogos evolutivos han estado tratando de intimidar a sus críticos con el cuento de que no comprenden lo que es la «ciencia» y que para hacer «ciencia» tenemos que actuar según «las reglas». Lo que no explican es que las reglas cambiaron cuando el Partido Darwinista acaparó el poder. El buen Charles Darwin era muy astuto. Tenía una vívida imaginación y mucha retórica, y en lugar de demostrar sus historias, venía a decir: «Esto es verosímil, ¿verdad? ¡Demostradme que estoy equivocado!» De modo que nos tragamos el anzuelo y emprendimos el camino de una empresa imposible, intentar demostrar una negativa universal, en lugar de poner a descubierto su bravata y obligarle a él a demostrar que estaba en lo cierto. Mientras estábamos distraídos, reunió a los Famélicos Cuentacuentos, les dio batas blancas de laboratorio y llegó a ser su santo patrón. Y desde entonces le han estado en deuda.

Los antievolucionistas han sido llevados al aprieto de intentar demostrar que este o aquel pretendido dinosaurio emplumado no es realmente el antecesor de las aves, o que no se puede extrapolar sin fin este o aquel cambio microevolutivo, sin darse cuenta de que están tratando de ganar en un juego en el que el adversario tiene la potestad de ir haciendo las reglas al paso. El que establece las reglas controla el juego.

La razón de que los miembros del Partido Darwinista sean tan vehementes contra sus críticos es que sus puestos de trabajo están en juego. Losverdaderos padres fundadores de la ciencia declararon su independencia frente a las especulaciones estableciendo una constitución no escrita que exigía que los resultados científicos debían ser observables, susceptibles de ensayo y reproducibles. Pero posteriores dirigentes, cediendo a las presiones de grupos de presión con intereses creados que encontraban que esto era demasiado trabajo, comenzaron con programas de dotaciones económicas como la Gran Sociedad de los Cuentacuentos. Esta gran sociedad irrumpió en los laboratorios, eliminó las redomas y los amperímetros, y montó divanes alrededor de mesas de comida llenas de «fascinantes especulaciones» (véase comentario para el 18 de sept. [2003]). A su debido tiempo, la Ciencia Oficial devino una engordada burocracia dedicada a distribuir fondos a más y más banquetes de cuentacuentos, mientras que aquellos resistentes individualistas que seguían creyendo en los principios fundamentales de la ciencia se veían llenos de cargas para el mantenimiento de un creciente estado intervencionista. Los pocos que llamaron al juego limpio fueron acusados de discurso de odio y ridiculizados como irracionales, oscurantistas supersticiosos que sencillamente no entendían qué era la «ciencia».

Si la gente se despertase y se diese cuenta de que los darwinistas no están contribuyendo de manera justa, que la verdadera ciencia está subvencionando la interminable búsqueda de los darwinistas por un buen cuento, habría gente que perdería unos puestos injustificables. Pero la ciencia misma seguiría en marcha. La buena ciencia que construye estaciones espaciales y que descubre motores moleculares, que explora Marte y que exhuma huesos de dinosaurios y clasifica colibríes, seguiría en pie y en marcha. La medicina seguiría avanzando, y los telescopios se seguirían vendiendo, y se seguirían acumulando verdaderos descubrimientos. Pero si el público exigiese responsabilidades, todos los programas inútiles, de distracción y parásitos promovidos por el Partido Darwinista se desvanecerían. Habría muchos que ahora parecen muy imponentes que tendrían que dedicarse a contar historias en las fiestas mayores de los pueblos.


Fuente: Creation·Evolution Headlines – How Darwinism Produces Job Security 22/12/2003
Redacción: David Coppedge © 2003 Creation Safaris –www.creationsafaris.com
Traducción y adaptación: Santiago Escuain — © SEDIN 2008 –www.sedin.org

Sir Charles Lyell

Fuente: Sir Charles Lyell

Lyell, Sir Charles (1797-1875), geólogo escocés cuyos escritos han influido enormemente en el desarrollo de la geología moderna.

Principles of Geology

Principles of Geology

Nació en Kinnordy (hoy Angus) y se formó en Universidad de Oxford. Estudió derecho y entró en la abogacía, pero pronto se dedicó casi totalmente a la ciencia, sobre todo a la geología. Basándose en los trabajos iniciales del geólogo escocés del siglo XVIII James Hutton, Lyell desarrolló la teoría de la uniformidad. Esta teoría establece que todos los procesos naturales que cambian la Tierra en el presente lo han hecho de forma idéntica en el pasado. Lyell apoyó esta teoría en las observaciones geológicas que realizó durante sus largos viajes por Europa y América del Norte.

Charles Lyell

Charles Lyell

La teoría de la uniformidad se contrapone a la del catastrofismo, muy popular entre los científicos de la época de Lyell. Esta teoría postulaba que sólo las grandes catástrofes podrían cambiar la formación básica de la Tierra, y que ésta tenía 6.000 años de antigüedad. La mayor parte de los científicos creían que el catastrofismo era compatible con la interpretación bíblica de la creación de la Tierra. Lyell publicó sus teorías en la obra Principios de geología, que revisó 11 veces entre 1830 y 1872. Las teorías de Lyell influyeron en el trabajo de su amigo Charles Darwin, que formuló la teoría de la evolución. Algunos aspectos de esta última contradicen ciertos principios de la teoría de la uniformidad. Sin embargo, Lyell se convirtió en un gran defensor de las teorías de Darwin.

Lyell es considerado también como uno de los fundadores de la estratigrafía, el estudio de las capas de la superficie de la Tierra. Elaboró un método para clasificar los estratos, o capas, mediante el estudio de los antiguos estratos marinos de Europa occidental. Se dio cuenta de que los estratos marinos más cercanos a la superficie, y que son los más recientes, contenían muchas especies de moluscos con caparazón que viven actualmente en el mar. Por otra parte, los estratos más antiguos y profundos contenían cada vez menos fósiles de las especies vivientes. Lyell dividió las rocas de este periodo en tres épocas, basadas en los porcentajes de decrecimiento de especies modernas. Los tres nombres con que denominó estas épocas —eoceno, mioceno y plioceno— se utilizan todavía hoy. Lyell fue nombrado sir en 1848 y barón en 1864.

Teoría del equilibrio dinámico

Lyell formula su teoría del equilibrio dinámico en el contexto geológico, para después aplicarla al mundo de lo orgánico:

  • En la historia de la tierra, Lyell distingue dos procesos básicos de la morfogénesis geológica, dos procesos que se habrían producido periódicamente, compensándose el uno al otro: los fenómenos acuosos (erosión y sedimentación) y los fenómenos ígneos (volcánicos y sísmicos).
  • Paralelamente, en la historia de la vida, Lyell supuso que se habían dado períodos sucesivos de extinción y creación de especies: el movimiento aleatorio de los continentes habría originado profundos cambios climáticos y muchas especies, al no poder emigrar o competir con otros grupos biológicos, se habrían extinguido, siendo sustituidas por otras creadas mediante leyes naturales.

Influencia

Los Principios de geología se convirtieron en la más influyente de las obras de geología del siglo XIX y la buena venta de sus sucesivas ediciones fue la principal fuente de sustento de su autor. Charles Darwin leyó el primer volumen de la obra de Lyell durante su viaje de exploración en el HMS Beagle y escribió que los Principios de geología habían cambiado su forma de mirar el mundo, siendo una inspiración fundamental para El origen de las especies. Autores literarios como Herman Melville o Alfred Tennyson también obtuvieron inspiración en las obras de Lyell por su retrato de la acción de las fuerzas de la naturaleza.

Bibliografía

Referencias

  • Gribbin, John (2005), Historia de la ciencia, 1543-2001, Barcelona: Crítica.
  • Secord, James A. (1997), «Introduction» to Charles Lyell’s Principles of Geology, Londres: Penguin.
  • González Recio, José Luis (2003), Teorías de la vida, Madrid: Síntesis.

Véase también

Enlaces externos

Colabora en Commons. Commons alberga contenido multimedia sobre Charles Lyell.

http://es.wikipedia.org/wiki/Charles_Lyell

¿Diseño Inteligente?

¿Diseño Inteligente?

Un informe especial reimpreso de la revista Historia Natural (Natural History)

Puntos principales del artículo

Tres proponentes del Diseño Inteligente (DI) presentan sus opiniones sobre el diseño en el mundo natural. Cada perspectiva está seguida inmediatamente por una respuesta de un proponente de la evolución (EVO). El informe, reimpreso en su totalidad, comienza con una introducción de la revista Historia Natural y concluye con una revisión sobre el movimiento del Diseño Inteligente.

Los siguientes autores contribuyeron a este informe de Historia Natural: biografía de los autores

  • Richard Milner y Vittorio Maestro, ed. (introducción)
  • Michael J. Behe, Ph.D. (DI) y Kenneth R. Miller, Ph.D. (EVO)
  • William A. Dembski, Ph.D. (DI) y Robert T. Pennock, Ph.D. (EVO)
  • Jonathan Wells, Ph.D. (DI) y Eugenie C. Scott, Ph.D. (EVO)
  • Barbara Forrest, Ph.D. (perspectiva general)

Abril 2002

Introducción

Preparado por Richard Milner y Vittorio Maestro, editores principales de la revista
Historia Natural

La idea de que la complejidad de un organismo es evidencia de la existencia de un diseñador cósmico fue avanzada varios siglos antes del nacimiento de Charles Darwin. Su exponente más conocido fue el teólogo inglés William Paley, creador de la famosa analogía del fabricante de relojes. Si encontramos un reloj de bolsillo en un campo, escribió Paley en 1802, inmediatamente podemos inferir que fue producido no por procesos naturales actuando ciegamente pero por un intelecto humano diseñador. De la misma manera, él razonó, el mundo natural contiene abundante evidencia de un creador sobrenatural. El argumento por diseño, como es conocido, prevaleció como la explicación del mundo natural hasta la publicación del Origen de las Especies en 1859. El peso de la evidencia que Darwin acumuló tan pacientemente, convenció rápidamente a los científicos de que la evolución por selección natural explicaba mejor la diversidad y la complejidad de la vida. “No puedo creer,” escribió Darwin en 1868, “que una teoría falsa pueda explicar tantas clases de hechos.”

Sin embargo, en ciertos círculos, la oposición al concepto de la evolución ha persistido hasta el presente. El argumento del diseño ha sido revivido recientemente por un número de académicos con credenciales científicas, los cuales mantienen que su versión de la idea (a diferencia de las ideas de Paley) es apoyada fuertemente por la microbiología y por las matemáticas. Estos antievolucionistas se diferencian de los creacionistas fundamentalistas en que ellos aceptan que algunas especies sí cambian (pero no mucho) y que la edad de la Tierra es mucho más de 6,000 años. Sin embargo, al igual que sus predecesores, ellos rechazan la idea de que la evolución da cuenta de la multitud de especies que vemos hoy en día. También buscan colocar su concepto (conocido como diseño inteligente) dentro del curriculum de ciencias de las escuelas.

La mayoría de los biólogos han concluido que los proponentes del diseño inteligente muestran o ignorancia o un mal entendimiento de la ciencia evolucionaria. A pesar de esto, sus propuestas están siendo escuchadas en varios círculos políticos y educativos y actualmente son el objeto de un debate dentro de la Junta de Educación del estado de Ohio. A pesar de que la revista Historia Natural no presenta o analiza a fondo en las páginas que siguen el fenómeno del diseño inteligente, aquí ofrecemos para la información de los lectores varias opiniones cortas por tres proponentes principales de la teoría, conjuntamente con tres respuestas. La sección concluye con una revisión del movimiento del diseño inteligente escrita por una filósofa e historiadora cultural quien ha monitoreado su historia por más de una década.

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Declaración sobre el Diseño Inteligente

El Reto de la Complejidad Irreducible

Cada célula viviente contiene muchas máquinas moleculares ultrasofisticadas.

Por Michael J. Behe

Los científicos usan el término “caja negra” para referirse a un sistema del cual se desconoce su funcionamiento. Para Charles Darwin y sus contemporáneos, la célula viva era una caja negra, pues su mecánica fundamental era totalmente desconocida. Ahora sabemos que, muy lejos de estar formada por un tipo simple de protoplasma uniforme (como creían muchos de los científicos del Siglo XIX) cada célula viva contiene muchas máquinas moleculares ultrasofisticadas.

¿Cómo podemos decidir si la selección natural Darwiniana puede dar cuenta a la increíble complejidad que existe a nivel molecular? El mismo Darwin definió el estándar cuando reconoció que “Si se pudiera demostrar que ha existido algún órgano complejo que no fue formado por numerosos y sucesivos cambios pequeños, mi teoría se desmoronaría por completo.”

Algunos sistemas parecen ser muy difíciles de formar por modificaciones sucesivas. Yo llamo a estos sistemas irreduciblemente complejos. Un ejemplo cotidiano de un sistema irreduciblemente complejo es la humilde trampa para ratones. Ella consiste de (1) una plataforma o base de madera; (2) un martillo de metal, el cual aplasta al ratón; (3) un resorte con los extremos extendidos, el cual propulsa al martillo; (4) un gatillo que suelta al resorte; y (5) una barra de metal que conecta al gatillo y que sostiene armado al martillo. Uno no puede atrapar a un ratón con solo una plataforma, añadir después un resorte y atrapar a unos cuantos ratones más, después añadir la barra de metal y atrapar otros cuantos más. Todas las piezas deben estar un sus lugares antes de poder cazar a un ratón.

Los sistemas irreduciblemente complejos no parecen ser buenos candidatos a haber sido producidos por numerosos y sucesivos cambios pequeños de sistemas predecesores, porque cualquier precursor al cual le faltara una pieza crucial no hubiera podido funcionar. La selección natural solo puede escoger entre sistemas que ya están funcionando, por lo que la existencia en la naturaleza de sistemas biológicos irreduciblemente complejos representa un poderoso reto a la teoría Darwiniana. Podemos observar con frecuencia estos sistemas en los organelos de las células, en los cuales la remoción de un elemento causaría que el sistema completo dejara de funcionar. El flagelo de las bacterias es un buen ejemplo. Ellos son como motores fuera de borda que las células bacterianas usan para su autopropulsión. Tienen una hélice larga, como un látigo, que es girada por un motor molecular. La hélice está unida al motor por una junta universal. El motor está sostenido por proteínas que actúan como una base de estabilización. Otras proteínas actúan como cojinetes que permiten al eje penetrar la membrana bacteriana. Hacen falta docenas de proteínas para que obtener un flagelo operativo. En la ausencia casi cualquiera de ellas, el flagelo no funciona o no puede ser construido por la célula.

Otro ejemplo de complejidad irreducible es el sistema que permite que las proteínas lleguen a los compartimentos subcelulares apropiados. En la célula eucariótica existe un cierto número de lugares donde ocurren labores especializadas, tales como la digestión de nutrientes y la excreción de productos de desecho. Las proteínas son sintetizadas afuera de estos compartimentos y pueden llegar a sus destinos apropiados solo con la ayuda de químicos “señaladores” que prenden y apagan a otras reacciones en los momentos apropiados. Este flujo constante y regulado dentro de la célula corresponde a otro asombroso sistema complejo e irreducible. Todas las partes deben funcionar sincronizadamente o el sistema se colapsa. Otro sistema más es el exquisitamente coordinado mecanismo que causa la coagulación de la sangre.

Los libros de texto y los artículos científicos en bioquímica describen los mecanismos de algunas de las máquinas moleculares vivas que existen dentro de nuestras células, pero ofrecen muy poca información sobre cómo evolucionaron estos sistemas por selección natural. Muchos científicos admiten francamente su desconcierto acerca de cómo han podido originarse, pero rechazan entretener la hipótesis obvia: que quizás las máquinas moleculares parecen ser diseñadas porque en realidad son diseñadas.

Yo tengo esperanza de que la comunidad científica eventualmente admita la posibilidad del diseño inteligente, aún cuando esta aceptación sea discreta y callada. Mi razón para ser optimista es el avance mismo de la ciencia, la cual descubre cada día nuevas complejidades en la naturaleza, las cuales son razones frescas para reconocer el diseño inherente en la vida y en el universo.

Respuesta de la evolución a Michael J. Behe

El Defecto en la Trampa de Ratones

El diseño inteligente falla el examen de la bioquímica.

Por Kenneth R. Miller

Para poder entender porqué la comunidad científica no está muy impresionada por los intentos de resucitar el llamado argumento del diseño, uno no tiene que ver más allá que el mismo ensayo de Michael J Behe. Él afirma que los sistemas bioquímicos complejos no pueden haber sido producidos por la evolución porque poseen una cualidad que él llama complejidad irreducible. Al igual que con las trampas de ratones, estos sistemas no pueden funcionar a menos que cada una de sus partes se encuentre en el lugar apropiado. Dado que “la selección natural solo puede escoger entre sistemas que ya están funcionando” no existe ninguna forma por la cual los mecanismos Darwinianos pueden haber producido los sistemas complejos que se encuentran en las células vivientes. Y si estos sistemas no pueden haber evolucionado, ellos han debido ser diseñados. Esa es la totalidad de la “evidencia” bioquímica para el diseño inteligente.

Irónicamente, el ejemplo del mismo Behe, la trampa de ratones, muestra porqué está equivocada esta idea. Elimina dos de las partes (el gatillo y la barra de metal) y puede que no tengas una trampa de ratones pero tienes una máquina de tres partes que hace un clip de corbata o un clip de papel perfectamente funcional. Quita el resorte y tienes un llavero de dos partes. El gatillo de algunas trampas puede ser usado como un anzuelo y la base de madera como un pisapapeles; aplicaciones útiles de las demás partes incluyen una gran variedad de cosas como mondadientes, cascanueces y tablillas sujetapapeles. El punto, entendido desde hace mucho tiempo por la ciencia, es que pedazos y piezas de las máquinas supuestamente irreduciblemente complejas pueden haber tenido diferentes (pero aún útiles) funciones.

La contención de Behe de que todas y cada una de las piezas de una máquina, mecánicas o bioquímicas, deben estar ensambladas en su forma final antes de que algo útil pueda emerger, es simplemente falsa. La evolución produce máquinas bioquímicas complejas por medio de copiar, modificar y combinar proteínas previamente usadas para otras funciones. ¿Quiere ejemplos? Los sistemas en el ensayo de Behe nos sirven muy bien.

Él escribe que la ausencia de “casi cualquiera” de sus partes hace que el flagelo bacteriano “no funcione.” Pero, ¿adivine qué? Un pequeño grupo de proteínas del flagelo sí funciona sin el resto de la máquina. Es usado por muchas bacterias como un dispositivo para inyectar venenos a otras células. A pesar de que la función llevada a cabo por esta parte pequeña es diferente cuando trabaja sola, aún así puede ser influenciada por la selección natural.

Las proteínas clave que aglutinan la sangre siguen este patrón también. Ellas son, en realidad, versiones modificadas de proteínas que son usadas por el sistema digestivo. El elegante trabajo de Russell Doolittle ha mostrado como la evolución duplicó, reasignó y modificó a estas proteínas para producir el sistema de coagulación de la sangre en los vertebrados.

Y Behe puede levantar las manos y decir que él no puede imaginarse como los componentes que mueven las proteínas entre los compartimentos intracelulares pueden haber evolucionado, pero los científicos que trabajan con estos sistemas están completamente en desacuerdo. En un artículo de la revista científica Cell (Célula) en 1998, un grupo de científicos del Instituto Sloan-Kettering liderado por James Rothman, describió la extraordinaria simplicidad y uniformidad de estos mecanismos. Ellos también notaron que estos mecanismos “sugieren en una forma natural como pudieron evolucionar en primer lugar los muchos y diversos compartimentos en las células eucarióticas.” Parece entonces que los investigadores activos ven algo muy diferente de lo que ve Behe en estos sistemas. Ellos ven a la evolución.

Si Behe desea sugerir que las complejidades de la naturaleza, la vida y el universo revelan un mundo de significado y propósito consistente con una inteligencia divina, su punto es filosófico, no científico. Incidentalmente, es un punto de vista filosófico que yo comparto. Sin embargo, para apoyar este punto de vista, uno no debe encontrar necesario pretender que sabemos menos de lo que realmente sabemos sobre la evolución de los sistemas de vida. En el análisis final, la hipótesis bioquímica del diseño inteligente fracasa, no porque la comunidad científica se cierre a ella, sino por la razón más básica de todas: porque está abrumadoramente contradecida por la evidencia científica.

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Declaración sobre el Diseño Inteligente

Detectando el Diseño en las Ciencias Naturales

La inteligencia deja atrás una seña o evidencia característica.

Por William A. Dembski

En la vida ordinaria, las explicaciones que invocan al azar, a la necesidad o al diseño cubren todas las eventualidades. Sin embargo, en las ciencias naturales, una de estas modalidades se considera superflua. El diseño. Desde la perspectiva de las ciencias naturales, el diseño, como la acción de un agente inteligente, no es una fuerza creativa fundamental en la naturaleza. Al contrario, las causas naturales ciegas, caracterizadas por el azar y la necesidad y reguladas por leyes sin romper, son pensadas suficiente para llevar a cabo toda la creación de la naturaleza. La teoría de Darwin es un caso en particular.

¿Pero cómo sabemos que la naturaleza no necesita ayuda de una inteligencia diseñadora? Con certeza, en las ciencias especiales, desde la forénsica a la arqueología a la Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (SETI en inglés), el apelar a una inteligencia diseñadora es indispensable. Es más, dentro de estas ciencias existen técnicas bien desarrolladas para identificar la inteligencia. Esencial para estas técnicas es la habilidad de eliminar al azar y a la necesidad.

Por ejemplo, ¿cómo puede la radioastrónoma en la película Contacto (protagonizada por Jodie Foster y basada en la novela del mismo nombre por Carl Sagan) inferir la presencia de inteligencia extraterrestre en los pulsos y pausas provenientes del espacio que ellos monitorean? Los investigadores analizan las señales por medio de computadoras que están programadas para reconocer muchos patrones predeterminados. Las señales que no encajan con estos patrones pasar por el “tamiz” y son clasificadas como al azar. Después de años recibiendo señales “azarosas” que aparentemente no significan nada, los investigadores descubren un patrón de pulsos y pausas que corresponde a la secuencia de todos los números primos entre 2 y 101. Los números primos, por supuesto, son aquellos divisibles solamente por si mismos y por uno. Cuando una secuencia comienza con dos pulsos, luego una pausa, 3 pulsos, luego una pausa … y continúa hasta 101 pulsos, los investigadores deben inferir la presencia de una inteligencia extraterrestre.

He aquí el porqué. No existe nada en las leyes de la física que requiere que las señales de radio tomen una forma u otra. La secuencia es entonces contingente en vez de necesaria. Además, es una secuencia larga y, por lo tanto, compleja. Note que si la secuencia carece de complejidad, puede ser fácilmente producida por el azar. Finalmente, no solo era compleja, pero exhibía un patrón o especificación dada independientemente (no solo era una secuencia cualquiera de números, pero una secuencia matemáticamente significativa: los números primos).

La inteligencia deja tras de sí una marca o señal característica, la cual yo llamo “complejidad especificada.” Un evento exhibe complejidad especificada si es contingente y, por lo tanto, no necesario; si es complejo y, por lo tanto, no fácilmente repetible al azar; y si es especificado en el sentido de exhibir un patrón dado independientemente. Note que la complejidad en el sentido de la improbabilidad no es suficiente para eliminar el azar. Tire una moneda suficientes veces y será testigo de un evento altamente complejo o improbable. Aún así, usted no tendrá razón alguna para no atribuirlo al azar.

El punto importante acerca de las especificaciones es que ellas deben ser dadas objetivamente y no impuestas a los eventos después de los hechos. Por ejemplo, si un arquero dispara flechas contra una pared y nosotros después pintamos los blancos alrededor de ellas, estamos imponiendo un patrón después de los hechos. Al contrario, si se colocan blancos al principio (“especificados”) y luego el arquero les pega con exactitud, sabemos que fue por diseño.

En mi libro La Inferencia del Diseño, yo argumento que la complejidad especificada detecta con certeza al diseño. Sin embargo, en ese libro me enfoco principalmente en ejemplos del ser humano en vez de ejemplos de las ciencias naturales. La crítica principal a este trabajo hasta la fecha se refiere a si el mecanismo Darwiniano de la selección natural y la variación al azar no son, de hecho, capaces de generar complejidad especificada. Más recientemente, en Sin Almuerzo Gratis, yo muestro que los procesos naturales no dirigidos tales como el mecanismo Darwiniano, son incapaces de generar la complejidad especificada que existe en los organismos biológicos. De esto sigue que el azar y la necesidad son insuficientes para las ciencias naturales y que las ciencias naturales deben dejar algo de espacio para el diseño.

Respuesta de la evolución a William A. Dembski

El Teatro de la Ciencia y el Misterio

El caso del agente secreto.

Por Robert T. Pennock

William A. Dembski afirma detectar “complejidad especificada” en las cosas vivientes y argumenta que esto es prueba de que las especies han sido diseñadas por un agente inteligente. Una falla de este argumento es que él quiere definir el diseño inteligente por una negativa, es decir, como algo que no es ni al azar ni por necesidad. Pero la definición es amañada: la necesidad, el azar y el diseño ni son categorías mutuamente exclusivas, ni tampoco agotan las posibilidades. Por ende, uno no puede detectar a un agente inteligente por el proceso de eliminación que él sugiere. La ciencia requiere evidencia positiva. Esto es el caso cuando uno trata de detectar la huella de la inteligencia humana, pero es especialmente cierto cuando se analiza la extraordinaria declaración de que la complejidad biológica es diseñada intencionalmente.

Sobre este tema, las analogías del arquero y del SETI de Dembski son pistas falsas, pues ellas dependen tácitamente de un entendimiento a priori del intelecto humano y de la motivación, así como de procesos causales relevantes. Una inferencia de diseño como aquella de la película Contacto, por ejemplo, dependería del conocimiento previo sobre la naturaleza de las señales de radio y de otros procesos naturales, junto con asumir que una secuencia de números primos es el tipo de patrón que otro científico escogería enviar como una señal. Sin embargo, las secuencias extrañas encontradas en el ADN son muy diferentes a las series de números primos. Dembski no tiene ninguna forma de mostrar que los patrones genéticos fueron “montados a priori” o “dados independientemente.”

Dembski ha sido publicitado como “el Isaac Newton de la teoría de la información,” y en sus escritos, los cuales incluyen los libros que él cita en este ensayo, él insiste que su “ley de la conservación de la información” prueba que los procesos naturales no pueden aumentar la complejidad biológica. Él no explica su caso aquí y refutarlo tomaría demasiado espacio. Sea suficiente decir que existe una conexión entre la noción técnica de la información y la entropía, de tal manera que el argumento de Dembski se destila a una reformulación de la vieja declaración de los creacionistas de que la evolución viola a la segunda ley de la termodinámica. Simplemente, esta ley dice que en el universo existe una tendencia a la disminución de la complejidad. Los creacionistas se preguntan entonces cómo pueden los procesos evolucionarios producir formas de vida más complejas a partir de unas más primitivas. Pero desde hace mucho tiempo sabemos porqué este tipo de argumento falla: la segunda ley de la termodinámica se aplica a sistemas cerrados y los sistemas biológicos no son cerrados.

En el proceso evolucionario, un aumento en la complejidad biológica no representa un “almuerzo gratis”. Este aumento está comprado y pagado, debido a que la variación genética al azar está sujeta a la selección natural por el ambiente, el cual ya está estructurado. De hecho, los investigadores están empezando a usar los procesos Darwinianos, implementados en computadoras o in vitro, para evolucionar sistemas complejos y para proveer soluciones a los problemas de diseño en formas tales que están fuera del poder de meros agentes inteligentes.

Si de verdad pensáramos que la información genética es similar a las señales en la película Contacto, ¿no deberíamos inferir que fueron diseñadas por extraterrestres? Los teóricos del diseño inteligente a veces mencionan a los extraterrestres como posibles sospechosos, pero la mayoría parece tener sus ojos dirigidos a un diseñador colocado un poco más arriba en los cielos. El problema es que la ciencia requiere un modelo específico que pueda ser probado o examinado. ¿Qué fue exactamente lo que hizo el diseñador y cuándo lo hizo? Las hipótesis nebulosas de diseño de Dembski, aún si las restringimos a los procesos naturales, proveen poquísimo material que puede ser examinado, y una vez que los procesos sobrenaturales se acuñan al proceso, éste pierde toda posibilidad de ser examinado o probado.

Newton estuvo perplejo por las órbitas complejas de los planetas. Él no pudo pensar en una forma natural para dar razón a su orden y concluyó que Dios debe estar empujando suavemente a los planetas para que el sistema continuara funcionando. (Quizás es en este sentido que Dembski es el Newton de la teoría de la información.) El origen de las especies pareció ser en un tiempo igualmente misterioso, pero Darwin siguió las pistas encontradas en la naturaleza para resolver el misterio. Uno puede, por supuesto, retener la fe religiosa en un diseñador capaz de transcender los procesos naturales, pero no hay manera de poder recoger sus huellas digitales.

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Declaración sobre el Diseño Inteligente

Los Elusivos Iconos de la Evolución

¿Qué nos dicen en realidad los pinzones de Darwin y las moscas de la fruta penta-aladas?

Por Jonathan Wells

Charles Darwin escribió en 1860 que “parece no haber más diseño en la variabilidad de los seres orgánicos y en la acción de la selección natural, que en el curso que sigue el viento cuando sopla.” A pesar de que muchas características de los organismos vivos parecen ser diseñadas, la teoría de Darwin expresó que ellas fueron en realidad el resultado de procesos sin dirección, tales como la selección natural y la variación al azar.

Sin embargo, las teorías científicas deben compaginar con la evidencia. Dos ejemplos de evidencia en favor de la teoría de la evolución de Darwin, utilizadas tan frecuentemente que yo las he llamado “iconos de la evolución,” son los pinzones de Darwin y la mosca de la fruta penta-alada (de cuatro alas), del género Drosophila. Sin embargo, me parece que ambos casos muestran que la teoría de Darwin no puede dar cuenta de todas las características de los seres vivos.

Los pinzones de Darwin consisten de varias especies en las Islas Galápagos que difieren principalmente en el tamaño y la forma de sus picos. Las diferencias en los picos están correlacionadas con lo que las aves comen, sugiriendo que varias especies pueden haber descendido de un ancestro común por medio de su adaptación a diferentes comidas a través de la selección natural. En 1970, los biólogos Peter y Rosemary Grant fueron a las Galápagos a observar este proceso en el campo.

En 1977, los Grant observaron como una sequía severa eliminó al 85% de una especie en particular en una de las islas. Los sobrevivientes tenían, como promedio, picos un poco más largos que les permitieron quebrar las semillas más duras que habían sobrevivido a la sequía. Esto era la selección natural en acción. Los Grant estimaron que veinte episodios como éste podrían incrementar el tamaño de los picos lo suficiente como para crear una nueva especie.

Sin embargo, cuando regresaron las lluvias, el tamaño promedio de los picos regresó a lo normal. Desde ese entonces, el tamaño de los picos ha oscilado alrededor de un promedio a medida que el suministro de alimentos ha fluctuado con el clima. No ha habido un cambio neto y no han emergido especies nuevas. De hecho, puede estar ocurriendo lo opuesto, ya que varias especies de pinzones de las Galápagos parecen estar uniéndose por hibridación.

Los pinzones de Darwin y muchos otros organismos, proveen evidencia que la selección natural puede modificar a características existentes, pero solo en especies establecidas. Los criadores de especies domésticas de plantas y animales han estado haciendo la misma cosa por cientos de años con la selección artificial. Pero, ¿dónde está la evidencia de que la selección natural produce nuevas características en nuevas especies?

Las nuevas características requieren nuevas variaciones. En la versión moderna de la teoría de Darwin, esta variación proviene de las mutaciones en el ADN. La mayoría de las mutaciones en el ADN son dañinas y por lo tanto son eliminadas por la selección natural. Sin embargo, unas cuantas tienen ventajas, como por ejemplo, las mutaciones que aumentan la resistencia antibiótica en bacterias y la resistencia a los pesticidas en plantas y animales. La resistencia a los antibióticos y a los pesticidas son a menudo citadas como evidencia de que las mutaciones en el ADN proveen las materias primas para la evolución, pero ellas afectan solo a procesos químicos. Los cambios evolucionarios mayores requerirían mutaciones capaces de producir también cambios anatómicos ventajosos.

Normalmente, las moscas de la fruta tienen dos alas y dos “balancines,” pequeñas estructuras detrás de las alas que les ayudan a estabilizarse cuando vuelan. En los años 70, los geneticistas descubrieron que una combinación de tres mutaciones en un gen individual produce moscas en las cuales los balancines se desarrollan como alas aparentemente normales. La mosca resultante, con sus cuatro alas, a veces es usada para ilustrar como las mutaciones pueden producir los tipos de cambios anatómicos que la teoría de Darwin necesita.

Pero las alas extra no son estructuras nuevas, sino duplicaciones de estructuras ya existentes. Es más, las alas extra no tienen músculos y son, de hecho, peor que inútiles. Las moscas de la fruta con cuatro alas están severamente incapacitadas, como un pequeño aeroplano con sus alas extra colgando de su cola. Tal y como es el caso con otras mutaciones anatómicas que se han estudiado hasta ahora, estas mutaciones en las moscas no pueden proveer la materia prima para la evolución.

En ausencia de evidencia de que la selección natural y las variaciones al azar pueden dar cuenta de las características aparentemente diseñadas que poseen los organismos vivos, el asunto entero del diseño debe ser revisitado. Los estudiantes deben aprender lado a lado con los argumentos de Darwin, que el diseño permanece como una posibilidad.

Respuesta de la evolución a Jonathan Wells

La Naturaleza del Cambio

Los mecanismos evolucionarios dan comienzo a diferencias estructurales básicas.

Por Eugenie C. Scott

Sin haber definido “diseño,” Wells afirma que “muchas características de los organismos vivos parecen ser diseñadas.” De allí él contrasta a la selección natural (no dirigida) con el diseño (dirigido), aparentemente tratando de retornar a la noción pre-Darwiniana de que un Diseñador es directamente responsable por la forma en que los organismos encajan con sus ambientes. Darwin propuso una explicación científica, no religiosa: la forma en que los organismos encajan con sus ambientes es el resultado de la selección natural. Como todas las explicaciones científicas, él se basa en la causalidad natural.

Wells contiende que “la teoría de Darwin no puede dar cuenta de todas las características de los seres vivos.” Sin embargo, no tiene por que darla. Hoy en día los científicos explican las características de los seres vivos no solo invocando a la selección natural sino también a una serie de procesos biológicos que Darwin desconocía, incluyendo la transferencia de genes, la simbiosis, el rearreglo cromosómico, y la acción de genes reguladores. Al contrario de lo que Wells mantiene, la teoría evolucionaria no es inadecuada. Ella encaja a la evidencia muy bien.

Leyendo lo que escribe Wells, uno puede no darse cuenta de la importancia de los cuidadosos estudios de los Grant, los cuales demostraron a la selección natural en tiempo real. El hecho de que la sequía terminó antes de que los científicos observaran la emergencia de nuevas especies es particularmente irrelevante; el tamaño de los picos sí oscila a corto plazo, pero dada una tendencia a largo plazo en el cambio climático, un cambio mayor en el tamaño promedio puede esperarse. Wells también sobrestima la importancia de la hibridación en los pinzones; ésta es extremadamente rara y puede aún estar contribuyendo a una nueva especiación. Los pinzones de las Islas Galápagos continúan siendo un ejemplo magnífico del principio de la radiación adaptativa. Las varias especies que difieren morfológicamente ocupan diferentes nichos. Las explicaciones de Darwin fueron que ellas evolucionaron todas de un ancestro común y los análisis genéticos proveen evidencia que lo confirma.

Wells admite que la selección natural puede operar en una población y correctamente apunta hacia la genética para dar cuenta del tipo de variación que puede llevar a “nuevas características en nuevas especies.” Pero él afirma que las mutaciones, tales como aquellas que producen las moscas con cuatro alas, no producen el tipo de cambio anatómico necesario para cambios evolucionarios mayores. ¿No puede él ver más allá del ejemplo y ver el principio? El hecho de que la primera demostración de un mecanismo genético poderoso terminó produciendo una mosca que no puede volar es irrelevante. Edward Lewis compartió un Premio Nobel por el descubrimiento de estos genes, conocidos como el complejo Ubx. Ellos tiene una importancia extraordinaria porque los genes de este tipo ayudan a explicar los diferentes tipos de planes corporales, los cuales representan las diferencias básicas estructurales entre un molusco y un mosquito, entre una esponja y una araña.

Los genes Ubx son parte de los genes HOX, los cuales se encuentran en animales tan diferentes como esponjas, moscas de la fruta y mamíferos. Ellos encienden o apagan a otros genes involucrados en, entre otras cosas, la segmentación y la producción de apéndices tales como antenas, patas y alas. Lo que específicamente es construido depende de otros genes más tarde en el proceso. Los diversos planes corporales de los artrópodos (insectos, crustáceos, arácnidos) son variaciones de los temas de la segmentación y de los apéndices, variaciones que parecen ser el resultado de cambios en los genes HOX. Investigaciones recientes muestran que los genes Ubx de las moscas suprimen la formación de patas en los segmentos abdominales, pero que los genes Ubx de los crustáceos no lo hacen. Un pequeño cambio en el Ubx resulta en una gran diferencia en el plan corporal.

Las mutaciones en estos interruptores primarios están involucradas en la pérdida de las patas en las culebras, en el cambio de aletas lobulares a manos, y en el origen de las mandíbulas en los vertebrados. La duplicación de los segmentos iniciada por los genes HOX permite la experimentación anatómica y la selección natural cierne los resultados. “Evo-Devo,” el estudio de la evolución y el desarrollo, en un área muy activa para la investigación científica, pero Wells implica que todo lo que esto produce son moscas de la fruta lisiadas.

Wells argumenta que las explicaciones naturales son inadecuadas y, por ende, que “los estudiantes deben aprender…que el diseño permanece como una posibilidad.” Debido a que en su lógica el diseño implica a un Diseñador, él está recomendando de hecho que la ciencia permita la causalidad no natural. En realidad, tenemos explicaciones sólidas con las que trabajar, pero aún en el caso de que no las tuviéramos, la ciencia solo tiene herramientas para explicar las cosas en términos de la causalidad natural. Eso es lo que hizo Darwin y eso es lo que estamos tratando de hacer hoy.

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Perspectiva General

La Nueva Evolución del Creacionismo

El diseño inteligente trata sobre política y religión, no sobre ciencia.

Por Barbara Forrest

La infame decisión de Agosto de 1999 por la Junta de Educación del Estado de Kansas de eliminar las referencias a la evolución de los estándares de ciencia fue fuertemente influenciada por proponentes de la teoría del diseño inteligente. A pesar de que William A. Dembski, una de las figuras más prominentes del movimiento, afirma que la “detectabilidad empírica de causas inteligentes le provee al diseño inteligente el puesto de teoría científica completa,” sus proponentes invierten la mayor parte de sus esfuerzos en convencer a los políticos y al público, no a la comunidad científica.

El movimiento del diseño inteligente, arrancado por el libro Darwin on Trial (1991) de Phillip E. Johnson, tomó cuerpo en 1996 en el Centro para la Renovación de la Ciencia y la Cultura (CRSC en sus siglas en inglés), auspiciado por el Instituto del Descubrimiento (Discovery Institute), un grupo de investigación teórica de Seattle. Johnson, un profesor de leyes cuya conversión religiosa catalizó sus esfuerzos antievolucionarios, ensambló a un grupo de apoyo el cual promueve la teoría del diseño con sus escritos, financiados por becas del SRSC. De acuerdo con una de sus declaraciones de misión anteriores, el SRSC busca “nada menos que derrocar al materialismo y a sus condenatorios legados culturales.

Johnson se refiere a los miembros del CRSC y a su estrategia como la Cuña, análogo a la cuña que parte al tronco de leña. Ellos quieren decir que el diseño inteligente liberará a la ciencia de las garras del “naturalismo ateístico.” Los diez años de historia de la Cuña revelan sus características más sobresalientes: los científicos de la Cuña no poseen un programa de investigación empírica y, consecuentemente, no han publicado ningún dato en revistas científicas arbitradas (o en ninguna otra parte) en apoyo a sus afirmaciones sobre el diseño inteligente. Lo que sí tienen es un programa agresivo de relaciones públicas, el cual incluye conferencias que ellos o sus seguidores organizan, libros o artículos a nivel popular, reclutamiento de estudiantes universitarios a través de charlas auspiciadas por los grupos religiosos de las universidades, y el cultivo de alianzas con cristianos conservadores y con figuras políticas de influencia.

La Cuña busca “renovar” a la cultura americana por medio del enraizamiento de las instituciones sociales más importantes en la religión evangélica, especialmente la educación. En 1996 Johnson declaró: “Esto en realidad no es, ni nunca ha sido, un debate sobre ciencia. Esto se trata de religión y de filosofía.” De acuerdo a Dembski, el diseño inteligente “es simplemente los Logos del Evangelio de Lucas traducidos al lenguaje de la teoría de la información.” Los estrategas de la Cuña buscan unificar a los cristianos a través de la creencia compartida en la “simple” creación, buscando así, en las palabras mismas de Dembski, “triunfar sobre el naturalismo y sus consecuencias.” Esto les permite a los proponentes del diseño inteligente coexistir bajo una carpa grande con otros creacionistas quienes explícitamente basan sus creencias en una interpretación literal del Génesis.

Como cristianos,” escribe Dembski, “sabemos que el naturalismo es falso. La naturaleza no es autosuficiente. … Sin embargo, ni la teología ni la filosofía pueden responder a la pregunta evidencial de si la interacción de Dios con el mundo es empíricamente detectable. Para responder a esta pregunta debemos buscar en la ciencia.” Jonathan Wells, un biólogo, y Michael J. Behe, un bioquímico, parecen ser precisamente el tipo de individuos del CRSC que le pueden dar al diseño inteligente su pasaje a la credibilidad. Sin embargo, ninguno de los dos ha llevado a cabo investigaciones para analizar la teoría y mucho menos producido datos que den reto a las masas de evidencia acumulada por biólogos, geólogos y otros científicos evolucionistas. Wells, parcialmente influenciado por Sun Myung Moon, el líder de la Iglesia de la Unificación, ganó su Ph.D. en estudios de religión y en biología específicamente “para dedicar mi vida a destruir el Darwinismo.” Behe ve como la pregunta relevante si “la ciencia puede proveer espacio para la religión.” En el fondo, los proponentes del diseño inteligente no están motivados en mejorar la ciencia sino en transformarla en una actividad teística que apoye a la fe religiosa.

Los seguidores de la Cuña están actualmente tratando de insertar al diseño inteligente en los estándares de ciencia en las escuelas del Estado de Ohio a través de la legislación estatal. Anteriormente, el CRSC dio publicidad a su sitio web de ciencias asegurándole a los educadores que su “curriculum Web puede ser apropiado sin tener que meterse en guerras de adopción de libros de texto” en efecto promoviendo a los educadores a saltarse los procedimientos normales. Anticipando un caso prueba, la Cuña publicó en la revista legal Utah Law Review, una estrategia legal para ganar sanción judicial. Recientemente, el grupo casi tuvo éxito en insertar a nivel federal en el Acta “Ningún Niño Dejado Atrás” del año 2001 un “sentido del Senado” que apoyaba la enseñanza del diseño inteligente. Entonces, el movimiento sigue avanzando, pero sus tácticas no son un substituto para la ciencia verdadera.

Richard Milner y Vittorio Maestro son editores de la revista Historia Natural (Natural History), la cual es publicada por El Museo Americano de Historia Natural. El museo fue creado en 1869 en la ciudad de Nueva York, EEUU. La revista fue establecida en 1900.
http://www.naturalhistorymag.com

Michael J. Behe, quien recibió su Ph.D. en bioquímica de la Universidad de Pennsylvania en 1978, es profesor de ciencias biológicas en la Universidad de Lehigh en Pennsylvania. Sus investigaciones recientes se concentran en el papel del diseño y la selección natural en la construcción de proteínas estructurales. Su libro La Caja Negra de Darwin: El Reto Bioquímico a la Evolución se encuentra disponible en pasta blanda (Touchstone Books, 1998)
http://www.lehigh.edu/%7einbios/faculty/behe.html

Kenneth R. Miller es profesor de biología de la Universidad de Brown. Sus trabajos de investigación en la estructura y función de la membrana celular han sido publicados en tales revistas científicas como Nature, Cell y el Journal of Cell Biology. Miller es coautor de varios libros de texto ampliamente utilizados a nivel de colegio y de universidad. En 1999 publicó Buscando al Dios de Darwin: La Búsqueda por un Científico del Espacio Común entre Dios y la Evolución (Cliff Street Books).
http://bms.brown.edu/faculty/m/kmiller/

William A Dembski, quien tiene un Ph.D. en matemáticas y filosofía, es profesor asociado de investigación en la Universidad de Baylor y Senior Fellow del Discovery Institute en Seattle. Sus libros incluyen: La Inferencia del Diseño: Eliminando el Azar a Través de Pequeñas Probabilidades (Cambridge University Press, 1998) y Sin Almuerzo Gratis: Por Qué la Complejidad Especificada No Puede Ser Obtenida Sin Inteligencia (Rowman & Littlefield, 2001).
http://www.designinference.com/

Robert T. Pennock es profesor asociado en estudios de ciencias y tecnología y profesor asociado en filosofía en la Escuela Lyman Briggs y en el Departamento de Filosofía de la Universidad Estatal de Michigan. Él es autor de Torre de Babel: La Evidencia en Contra del Nuevo Creacionismo (MIT Press, 1999) y editor de Creacionismo por Diseño Inteligente y sus Críticas: Perspectivas Filosóficas, Teológicas y Científicas (MIT Press, 2001).
http://www.msu.edu/~pennock5/

Jonathan Wells recibió dos doctorados, uno en biología celular y molecular de la Universidad de California en Berkeley y uno en estudios de religión de la Universidad de Yale. Ha trabajado como investigador postdoctoral en biología en la Universidad de California en Berkeley y ha enseñado biología en la Universidad Estatal de California en Hayward. Wells es también el autor de Íconos de la Evolución: ¿Ciencia o Mito? Por Qué Mucho de lo que Enseñamos Sobre la Evolución está Equivocado (Regnery Publishing, 2000).
http://www.arn.org/wells/jwhome.htm

Eugenie C. Scott posee un doctorado en antropología física. En 1978, después de enseñar antropología física por quince años a nivel universitario, aceptó el cargo de director ejecutivo del Centro Nacional para la Educación en las Ciencias. Ella es también presidente de la Asociación Americana de Antropólogos Físicos.
http://en.wikipedia.org/wiki/Eugenie_Scott

Barbara Forrest es profesor asociado de filosofía en la Universidad de Southwestern Louisiana. Ella recibió su doctorado de la Universidad de Tulane. Entre sus publicaciones académicas recientes se encuentran “La Posibilidad de Significado en la Evolución humana,” en Zygon: Journal of Religion and Science, Diciembre 2000.
http://www.selu.edu/Academics/ArtsSciences/CAS_Endowed%20Chairs/doc/dr_forrest.html

Por favor vea el artículo original en inglés para enterarse más sobre el tópico del artículo o para tener acceso a la lección que lo suplementa. (Enlaces y lecciones no han sido traducidas.)